La asociación que llevó a Botín al Constitucional desiste de su recurso
El Tribunal Constitucional no llegará a resolver, salvo viraje extremo, sobre la doctrina del Tribunal Supremo que impide mantener la acusación contra un procesado si la ejerce en solitario el representante de la acción popular y no la Fiscalía.
Fuentes del Constitucional acaban de confirmar el desistimiento –retirada del proceso- de la asociación que recurrió la sentencia del Supremo que en diciembre de 2007 tumbó el caso de las cesiones de crédito del Santander porque la acusación estaba únicamente sostenida por un partido –Iniciativa per Catalunya- y por la Asociación para la Defensa de Inversores y Clientes (ADIC).
Capitaneada por el abogado Antonio Panea, enfrentado de largo con el presidente del Santander, Emilio Botín, ADIC impugnó la sentencia ante el Constitucional, que admitió el recurso de amparo el 18 de octubre de 2010. El desistimiento del recurrente no implica obligatoriamente que el Constitucional deba dejar el caso. Pero las fuentes jurídicas consultadas consideran que esa opción es la más probable salvo en la hipótesis lejana de que la Fiscalía o la Abogacía del Estado soliciten un pronunciamiento del tribunal.
El abogado Antonio Panea no ha atendido esta mañana las llamadas de este diario, por lo que no ha sido posible preguntarle si ADIC ha habido algún tipo de acuerdo con el Santander para retirar el recurso.
Pero fuentes del tribunal han desvelado que el letrado de ADIC “presentó días atrás un documento por el que desiste”. Panea es precisamente el abogado que provocó la apertura de diligencias contra Baltasar Garzón bajo la acusación de que el hoy exjuez había aceptado pagos del Santander. El Supremo (TS) acabó archivando el caso tras someter a Garzón a un nuevo calvario, adicional al que terminó con su carrera judicial –las escuchas a abogados del caso Gürtel- y a una tercera causa –la referida a la investigación sobre los crímenes del franquismo- de la que el acusado salió absuelto.