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¿Soy demasiado mayor para un tratamiento de ortodoncia?

Una mujer se mira tras un tratamiento odontológico.

Mercè Palau

La ortodoncia es la especialidad de la odontoestomatología que tiene como principal objetivo prevenir y corregir las alteraciones de la posición de los dientes y de los maxilares. 

En España, menos del 40% de los jóvenes de 12-15 años tiene una oclusión adecuada y alrededor del 25% de los adultos jóvenes de 25-44 años necesita ortodoncia, según datos del Consejo General de Colegios de Odontólogos y Estomatólogos de España. 

Ortodoncia: no solo para conseguir unos dientes bonitos

Cuando pensamos en la ortodoncia, a menudo la asociamos al deseo de tener una sonrisa armónica y atractiva. Pero, si bien los tratamientos de ortodoncia pueden ayudarnos a conseguir ese objetivo, lo cierto es que nos ofrecen mucho más. 

Además de mejorar la estética de la sonrisa, a veces de forma espectacular, la ortodoncia resuelve problemas que van más allá de la colocación individual de los dientes y la corrección de las relaciones entre las arcadas dentarias. Un tratamiento adecuado de ortodoncia permite corregir los trastornos funcionales de la masticación e influir favorablemente sobre las alteraciones de los maxilares promoviendo la estética de la cara. Todo ello tiene una repercusión sobre la salud y duración de la dentadura.

Así pues la ortodoncia, al tratar un problema “médico” de los dientes, condiciona una mejoría estética y en muchos casos también potencia el bienestar psicológico. Es decir,  estética y salud van de la mano cuando hablamos de ortodoncia. 

Como reconoce la doctora Margarita Varela Morales, jefa de la Unidad de Ortodoncia de la Fundación Jiménez Díaz, “los dientes bien ordenados y relacionados duran más, son saludables, defienden otras estructuras y, además, son muy bonitos”. 

Por otra parte, la salud oral es una ventana a la salud general. La oclusión adecuada facilita la higiene oral, lo que a su vez reduce el riesgo de caries y enfermedad de las encías. Hoy sabemos que las repercusiones de las enfermedades de los dientes y las encías van mucho más allá del territorio de la boca, las articulaciones temporomandibulares y el aparato digestivo, alcanzando incluso la salud cardiovascular. 

El papel de la tecnología en ortodoncia

El proceso de alineamiento e interrelación adecuada de los dientes es complejo y requiere opciones de tratamiento avanzadas. Y son estos avances los que han hecho que el tratamiento hoy sea más cómodo y menos perceptible que nunca. “Tenemos una especialidad muy tecnológica”, reconoce la Dra. Varela, algo por lo que apostamos desde la Fundación Jiménez Díaz, cuyos expertos están comprometidos en el desarrollo de una especialidad en permanente evolución  que se plantea día a día aplicar sus nuevas bases científicas.

Los ortodoncistas no solo afrontan los retos con aparatos convencionales como los brackets metálicos o transparentes. La ortodoncia actual es un tipo de ingeniería mecánica aplicada dentro, pero también desde fuera de la boca, que involucra aparatos y materiales más innovadores. 

Por ejemplo, las “fundas” o alineadores transparentes (ortodoncia plástica) permiten lograr los mismos objetivos que los brackets pero de forma más cómoda, más estética y con una mayor satisfacción del paciente“, reconoce por su parte el doctor Pablo García-Camba, odontólogo adjunto de la Unidad de Ortodoncia de la Fundación Jiménez Díaz.

En efecto, muchas de las opciones de tratamiento actualmente disponibles están diseñadas para minimizar la visibilidad del aparato de forma que el paciente, sea cual sea su estilo de vida y actividad, pueda para adaptarse mejor. La investigación en este campo hace posible la incorporación de soluciones no sólo más estéticas sino también menos invasivas para el paciente y con un índice de complicaciones muy bajo. Ello se deriva en la necesidad de menos citas presenciales y muy pocas citas imprevistas por urgencias. 

Una especialidad que crece también con la edad del paciente

Si en algo ha avanzado de forma sorprendente la ortodoncia es en que hoy día permite tratar casos que hace unos años no se trataban debido a la edad. Según la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO), en los últimos años han aumentado de manera considerable los tratamientos de ortodoncia, sobre todo en adultos. 

“Hemos pasado de ser una especialidad limitada a los niños a tratar pacientes de todas las edades, sin límite alguno en ese sentido”, destaca el Dr García-Camba. En un estudio del que se hace eco la Revista Internacional de Investigaciones Científicas, los expertos  concluyen que, aunque el tratamiento de ortodoncia puede tener éxito a cualquier edad, son los adultos los que aprecian más sus beneficios. Estos beneficios —potenciados por los avances tecnológicos— son biológicos, pero también psicosociales. 

A un menor malestar, disminución de la frecuencia de las visitas, menor tiempo de tratamiento y posibilidad de elegir entre varias opciones, se une el impacto psicológico: desde el aumento de la autoestima y la seguridad en uno mismo. También implica un impacto social ya que en muchas ocasiones repercute en el ámbito de las relaciones personales o laborales.

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