La oposición recrimina a Garitano por su actitud “irresponsable” ante la UE en su política de residuos
La investigación iniciada por el comisario Europeo de Medio Ambiente, Janez Potocknik, sobre la ocultación de aspectos determinantes de los cambios en la política de residuos de la Diputación de Gipuzkoa como la paralización de la incineradora y otros aspectos económicos de los fondos el Banco Europeo de Inversiones ha supuesto un contratiempo para Bildu. Los responsables de la coalición soberanista en la diputación creían que el coste político de paralizar la incineradora -además del económico- ya estaba pagado.
Tras el acuerdo alcanzado en noviembre pasado por el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) y la UTE Gipuzkoa CGR -adjudicataria de la construcción del Centro de Gestión de Residuos de Gipuzkoa (CGR) de Zubieta en San Sebastián- para rescindir su relación contractual, el diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa, Iñaki Errazkin, proclamó: “El fantasma de la incineradora se ha acabado para siempre”. Nada más lejos de la realidad. Ese acuerdo ha costado al citado Consorcio los 8.190.000 euros que debe abonar a la empresa adjudicataria. Pero ahora empiezan para Errazakin y el diputado general, Martín Garitano, los quebraderos de cabeza comunitarios.
De momento, el primer movimiento de la Diputación ha sido anunciar esta tarde, vía comunicado, que ofrecerán toda la información a la Comisión europea. El diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa, Iñaki Errazki, ha indicado que si Europa desea más información sobre la gestión de residuos del territorio, la Diputación se la proporcionará“. Y ha señalado también que Gipuzkoa cumple con la normativa europea y que, además, tienen previsto dar más pasos en esa nueva política que no ha detallado. ”Si la Comisión Europea desea información sobre los pasos que vamos a dar en el futuro, la Diputación Foral de Gipuzkoa está plenamente dispuesta a dársela“, apunta.
La investigación comunitaria, adelantada el martes por eldiarionorte, no ha sido valorada de la misma manera por la oposición en las Juntas Generales guipuzcoanas, mientras Izaskun Bilbao -cuya pregunta inicial dirigida a la Comisión ha puesto en marcha la investigación no ocultaba su satisfacción por la investigación abierta por las autoridades comunitarias en materia medio ambiental. Y el portavoz del PNV en las juntas, Xabier Ezeizabarrena, calificó de “grave” que el Gobierno foral de Bildu “no haya informado a Europa sobre el incumplimiento” del Plan Integral de Gestión de Residuos Urbanos de Gipuzkoa (PIGRUG). El juntero peneuvista censuró “el incumplimiento sistemático” del plan por parte del Ejecutivo foral de Bildu que, “en vísperas de cumplir su tercer año en el Gobierno foral, no ha construido ni una sola de las infraestructuras previstas y financiadas por el BEI, al tiempo que los tres vertederos existentes en Gipuzkoa están a punto de colmatarse y no existen planes de cierre para 2014”, denunció.
Después de que el Comisario Europeo de Medio Ambiente, Janez Potocknik, haya censurado a la Diputación de Gipuzkoa por no haber informado a las instituciones comunitarias sobre la paralización de la incineradora, el secretario de Medio Ambiente del PSE-EE de Gipuzkoa, Denis Itxaso, ha lamentado que Bildu “lleva meses pretendiendo tomarnos el pelo”. La respuesta de la Comisión a la eurodiputada peneuvista revela que Europa desconoce los cambios en el Plan Integral de Gestión de Residuos Urbanos (PIGRUG) y que apenas si ha habido algún contacto verbal sobre el tema.
“Imagen patética” de Gipuzkoa
“Bildu celebra pueblo a pueblo la paralización de las plantas de Zubieta como si de fiestas patronales se tratara, pero lo cierto es que Gipuzkoa está siendo señalada por la Unión Europea como un territorio irresponsable donde impera la incertidumbre en algo tan básico para la salud ambiental como es la gestión de los residuos sólidos urbanos”. “Es lamentable la imagen que se proyecta”, ha añadido.
El PSE-EE puso el foco también en otro de los aspectos censurados por la Comisión: los créditos del BEI concedidos a Gipuzkoa. Itxaso cree que “despreciar de este modo los créditos blandos que el Banco Europeo de Inversiones concedió a Gipuzkoa para la construcción de las plantas que aseguraban el cumplimiento a las directivas europeas, supone dar un portazo de consecuencias imprevisibles para la credibilidad y solvencia del territorio histórico”.
Esta preocupación estaba también en la mesa de trabajo del portavoz de los populares en las Juntas Generales guipuzcoanas, Juan Carlos Cano: “No podemos estar contentos de que Europa pida cuentas, porque nos va a acarrear un coste a todos los guipuzcoanos”. Por ese motivo emplazó a Bildu y PNV a “cesar en su estrategia de garrotazo y tentetieso, algo que solo pretende un ”protagonismo en las urnas a costa del desgaste de Gipuzkoa y los guipuzcoanos“, según interpretó Cano. ”Tenemos que evitar a toda costa la imagen patética de Gipuzkoa en el exterior a la que nos arrastran Bildu y PNV“.
El PP cree que hay una alternativa que pasa por lo que decidan los partidos en Gipuzkoa y es “poner en valor la Comisión de estudio sobre la evolución financiera y las soluciones técnicas del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa, creada por PNV, PSE y PP” por lo que pidieron al resto de partidos que acaten las decisiones emanadas de dicho foro. “No hay que pedir soberanía, no debemos recurrir a otra instancia superior, cuando aquí tenemos el derecho y la capacidad para decidir sobre los residuos. Negociemos y acordemos”.
Lo cierto es que la basura espera. En su pregunta, la eurodiputada del PNV recordaba que Gipuzkoa debe tratar más de 200 000 toneladas de residuos al año, cifras correspondientes a lo depositado en los vertederos de la provincia en 2012 y “no cuentan con proyectos conocidos, plazos de ejecución, ni fórmulas de financiación y se suman a un cambio en la mecánica de recogida de los residuos sólidos urbanos impuesta contra la opinión de los usuarios”, en alusión al Puerta a Puerta (PAP). Y a juicio de populares y socialista, la “solución de los vertederos o depósitos de inertes, como los llama Bildu” no casa con las salidas que plantea la estrategia europea en esta materia tan controvertida“.
Y de eso va precisamente la investigación que ya está en marcha por parte del comisario Janez Potocknik: “si las capacidades de eliminación y valorización de la provincia son suficientes para garantizar el cumplimiento del artículo 16 de la Directiva marco sobre residuos, relativo a la autosuficiencia, así como de su artículo 4, relativo a la jerarquía de residuos”.
