Un segundo samurái se incorpora a la colección del museo de Armería de Vitoria
El museo de Armería de Vitoria expone desde hoy una segunda armadura de samurái de la época Edo, entre 1603 y 1868. La diputada foral de Cultura y Deporte, Ana del Val, ha presentado este martes la pieza junto con Cristina Aransay, jefa del servicio de restauración, e Isabel Ortiz de Errazti, restauradora de metales, coincidiendo con el Día Internacional de los Museos.
La armadura de samurái que se incorpora a la exposición del Museo de Armería de Vitoria fue adquirida en 1963 por Félix Alfaro Fournier. Se trata de una 'tosei gusoku', perteneciente a la época Edo, entre 1603 y 1868, “de cuando los guerreros japoneses se distinguían en la batalla llevando estas armaduras llamativas que son bellas y prácticas a la vez”, ha señalado del Val.
El proceso de restauración ha durado tres años, para que “el público pueda disfrutarlo en su estado original”. La armadura está formada por 17 piezas, confeccionada por maestros artesanos con materiales “diversos y antagónicos” como el hierro, la seda, la madera lacada o el latón. “La diferencia” con la armadura presentada en 2018 es que la más reciente adición tiene “menos metal y más hilos de seda”, lo que ha contribuido a que su estado de conservación fuera “peor”. La armadura está hecha de “escamas” de hierro lacado con laca negra Urushi y trenzada con la seda y una “pequeña tira de cuero”, los materiales “más ligeros”, de forma que se permite movilidad tanto vertical como horizontal.
“Son armaduras que están hechas como defensa en caso de guerra”, ha indicado Ortiz de Errazti; sin embargo, se encontraban en un periodo de paz. Su uso se limitó a demostrar su pertenencia a la casta de los samuráis. Aun así, la parte frontal de la armadura fue sustituida. “Una característica de lo japonés es que saben la técnica y siguen utilizándola, entonces, sustituyen”, ha añadido la restauradora. Ahora, tras finalizar el tratamiento de restauración, se exhibe en la sección de armas exóticas del Museo de Armería de Álava.
La diputada foral ha aprovechado para presentar también “Perezosa”, la obra de Coullaut-Valera que se encuentra en el exterior del Museo de Bellas Artes de Vitoria. Una obra fechada en 1936 que representa “el momento de desperezarse”. Asimismo, la diputada ha invitado a la ciudadanía a que participe en las actividades preparadas con motivo del Día Internacional de los Museos con el objetivo de “acercar” a los visitantes a estos espacios de “gran valor cultural”.
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