Gallardo, candidato del PSOE: “Retirarme por una denuncia falsa habría sido enseñar a la ultraderecha a eliminar candidatos de izquierda”
Miguel Ángel Gallardo (Villanueva de la Serena, 1974) está acostumbrado a ganar todo en política. Después de varias mayorías absolutas en su ciudad y tras su paso por la Diputación de Badajoz, de la que fue presidente en los últimos diez años, logró la victoria en dos primarias del PSOE extremeño, con pocos meses de diferencia, para hacerse con la Secretaría General con el objetivo de presidir la Junta de Extremadura.
Por eso María Guardiola ha adelantado las elecciones autonómicas, que llegan en el peor momento personal y político para Gallardo al estar esperando la celebración en mayo del juicio por el presunto 'enchufe' del hermano de Pedro Sánchez en la Diputación. A pesar de su situación, es el candidato del PSOE en la cita electoral del domingo, que, a su juicio, no busca la estabilidad en Extremadura, sino “apuntalar un liderazgo frustrado” en Génova.
En Extremadura se vive una situación inaudita por varios motivos: es el primer adelanto electoral, celebra elecciones por separado y eso está poniendo el foco político y mediático en la región, pero también es la primera vez que se presenta un candidato procesado, a la espera de juicio y con peticiones de inhabilitación sobre la mesa. ¿Cómo afronta esta realidad ante el electorado?
Lo verdaderamente inaudito es que una denuncia falsa impulsada por Manos Limpias siga abierta casi dos años después. Es cierto que estar procesado puede ser un problema y conlleva un riesgo, pero el riesgo mayor para la democracia sería permitir que una denuncia instrumental aparte del camino a un candidato. Si yo hubiera dado un paso atrás, si mi partido me lo hubiera pedido, le estaríamos enseñando el camino a la ultraderecha sobre cómo infiltrarse para elegir o derribar a los candidatos de la izquierda mediante denuncias falsas.
Sin embargo, la instrucción sigue su curso. ¿En qué situación quedaría usted, su partido o Extremadura si se convirtiera en presidente el domingo?
Sé que no he hecho nada y que esto quedará en nada. Hay que recordar un dato fundamental: la Fiscalía no acusa. Quienes acusan son Vox, el Partido Popular, Manos Limpias... toda esa esfera. La propia Fiscalía ha dicho que no hay delito. Lo que habría sido una injusticia irreparable es que, siendo inocente, no me hubiera podido presentar a estas elecciones.
Visto con perspectiva, ¿se equivocó al gestionar su entrada en la Asamblea y el aforamiento? Se le criticó mucho por prometer que no recogería el acta hasta que terminara el proceso y luego hacerlo.
Soy de los que piensan que cuando nadie entiende algo, el equivocado no es el mundo, sino uno mismo. Si se interpretó como un aforamiento interesado, es evidente que nos equivocamos. Probablemente, lo que falló fue mi ingenuidad al decir que no me incorporaría hasta que terminara el proceso. Digo ingenuidad porque había un interés claro por parte de los denunciantes de dilatar los tiempos artificialmente para que yo no pudiera cumplir mi palabra. Tenía que elegir entre incumplir esa promesa o dejar que decidieran por mí.
Se lo garantizo ya: no voy a solicitar que la causa se eleve al Tribunal Superior de Justicia [...] quiero que esto se dilucide cuanto antes
Sea cual sea el resultado, usted va a conseguir acta de diputado y, por lo tanto, estará aforado, ahora sin sospechas en cuanto a las motivaciones y formas de conseguirlo. ¿Intentará llevar de nuevo la causa al Tribunal Superior de Justicia de Extremadura?
Se lo garantizo ya: no voy a solicitar que la causa se eleve al TSJEx. Podría haber recurrido antes y habría ganado, pero no lo hice porque quiero que esto se dilucide cuanto antes. No voy a dilatarlo más.
Faltan cuatro días para las elecciones en Extremadura y, según las encuestas, el suelo electoral del PSOE podría quedar muy bajo. ¿Cuánto tiene que ver que el candidato socialista esté procesado?
Estoy convencido de que no se puede engañar a los extremeños durante tanto tiempo con una denuncia falsa. No sé si eso podrá afectar o no , pero lo que sí puedo asegurar es el daño emocional y político que he vivido por una verdadera deshumanización y un descrédito imparables. Aun así, ante este tipo de ataques lo que hay que dar es un paso al frente y no uno atrás. El mayor riesgo real sería apartar a un candidato por una denuncia que sabemos que va a quedar en nada.
Si se cumplen los pronósticos y el PP gana sin mayoría absoluta, ¿sería partidario de facilitar la investidura de Guardiola para imponer un cordón sanitario a Vox?
Primero, el PSOE tiene un proyecto político diametralmente diferente al del PP. Por lo tanto, no se nos puede pedir que acabemos resolviendo un problema que la propia Guardiola ha creado. Pero es más, no podemos hablar de cordones sanitarios cuando en realidad Vox ha estado en el Gobierno de Madrid y Vox ha gobernado con Guardiola y nunca lo echó, se fue Vox. Por lo tanto, de cordones sanitarios se podía haber hablado hace dos años y medio, pero una vez que ella decidió incorporarlos al Gobierno, solo podemos hablar de dos opciones: un Gobierno progresista, liderado por el PSOE con fuerzas de izquierda o uno de PP y Vox. El primero propone una política fiscal justa donde paguen más los que más tienen para garantizar sanidad, educación y dependencia. El otro profundizará en recortes que ya sufrimos, como esperar 15 días para el médico de cabecera o que 7.000 niños se hayan quedado sin transporte escolar al inicio del curso.
¿Liderará la oposición sea cual sea el resultado si pierde?
Claro que voy a liderar la oposición, ahí es donde me pondrían los ciudadanos. Lo que pasa es que yo aspiro a no tener que liderar la oposición.
Se lo digo porque hay algunas encuestas que sitúan el suelo en 19-18 diputados.
También las hay donde dicen otros resultados. Pero en cualquier caso, la encuesta que voy a valorar es la del día 21. Lo único que te puedo decir es que estaré donde digan los extremeños.
Guardiola no adelantó las elecciones por los presupuestos, sino por un mandato de Feijóo para usarnos como conejillo de indias
María Guardiola justificó el adelanto electoral por la imposibilidad de aprobar los presupuestos. Ustedes iniciaron la negociación con la Junta, pero presentaron una enmienda a la totalidad. ¿Hubo alguna opción real de que el PSOE facilitara esas cuentas?
No puede haber intención cuando Guardiola no los dejó ni debatir. El primer presupuesto [2025] fue un fracaso de su soberbia. Ya estaban pactados, pero se descolgó a última hora porque desde Madrid le prohibieron aprobar nada con el PSOE mientras el PP votaba en contra de la subida de las pensiones a nivel nacional. Y el segundo presupuesto [2026] no ha existido, era una excusa. Estas elecciones no son voluntad de los extremeños, son fruto de un mandato de Feijóo para utilizar a Extremadura como conejillo de indias e intentar apuntalar su liderazgo.
Promete un plan de vivienda pública a 90.000 euros, comedores escolares gratuitos, una subida salarial para los dicentes de 200 euros al mes, reducción de las listas de espera sanitarias... ¿Cómo se paga eso?
Se paga con la recuperación del impuesto de patrimonio, que eliminó Guardiola, y con una fiscalidad justa. Hoy hay rentas altas que no pagan casi impuestos por la amnistía fiscal de la Junta. Tampoco podemos regalar 85 millones de euros a las eléctricas, como harán PP y Vox, eliminando sus impuestos mientras debilitamos lo público.
¿Una política fiscal justa es sinónimo de subida de impuestos?
Sí, pero para las rentas de más de 60.000 euros y también recuperaremos el impuesto a los grandes tenedores de vivienda.
El PP ha conseguido meter en la agenda el cierre de la central nuclear de Almaraz y le acusa de defender una postura en Madrid, a favor de la clausura, y otra en Extremadura, a favor de la prórroga.
Nuestra posición es clara, firme y no ha cambiado porque, quien no miente, no tiene por qué cambiar su discurso. El tiempo nos ha dado la razón frente al bulo que María Guardiola montó en torno a la central. Nosotros siempre dijimos que para que hubiera una prórroga, primero las empresas propietarias tenían que solicitarla. Las empresas esperaron hasta el penúltimo día para pedirla y, en cuanto llegó la petición, el Gobierno de España la tramitó ante el Consejo de Seguridad Nuclear, como estamos convencidos de que se dará porque Almaraz cumple con las garantías.
Recuperaremos la ecotasa que pagan las eléctricas y el impuesto de Patrimonio para acabar con la amnistía fiscal de Guardiola a los ricos
¿Entonces el PSOE apoya la continuidad de la planta sin condiciones?
Queremos la prórroga de Almaraz mientras no haya una alternativa real, especialmente por los trabajadores de la zona. Ahora bien, ponemos condiciones claras: seguridad rigurosa y sin privilegios fiscales. Por eso, si llegamos al gobierno, cancelaremos la propuesta de Guardiola de reducirles el 50% de la ecotasa.
Afirma que la actitud de la Junta ha perjudicado el desarrollo industrial de la zona.
Rotundamente. Guardiola utilizó Almaraz como un motivo de confrontación permanente con el Gobierno de España. Esa obsesión por el conflicto político la llevó a meter en un cajón el mayor proyecto industrial de la zona de Campo Arañuelo: la gigafactoría de Navalmoral de la Mata. A día de hoy, las inversiones que debía hacer la Junta de Extremadura para ese proyecto no se han ejecutado por esa necesidad de confrontar.
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