Un colapso informático bloquea la sanidad gallega y compromete toda su cartera de servicios
Ni recetas, ni partes de baja, ni posibilidad de consultar la historia clínica de los usuarios. El sistema sanitario gallego ha sufrido este martes un colapso informático que ha enviado a muchos pacientes de vuelta a sus casas ante la imposibilidad de ser atendidos por los facultativos que les habían citado. Los centros de salud han tenido que paralizar su actividad y los efectos de la caída generalizada del sistema han afectado también a todos los hospitales públicos de la Comunidad Autónoma, al servicio de urgencias 061 y a las farmacias. Por no funcionar no funciona ni la web del Servizo Galego de Saúde (Sergas).
Fuentes de la consellería de Sanidade, consultadas por elDiario.es, aseguran que el problema tiene una causa eléctrica, un pico de tensión, que ha provocado el apagado de todos los dispositivos de la red a nivel gallego. Según las mismas fuentes se está trabajando en la solución de la incidencia reiniciando los equipos de manera progresiva. La Xunta descarta la posibilidad de que un hackeo esté tras la incidencia.
Algunos médicos han decidido pasar consulta a la manera tradicional, con fonendoscopio, papel y lápiz, para solventar los casos más sencillos de aquellos pacientes que han estado bloqueados en las salas de espera y sin que nadie les explicase qué estaba ocurriendo.
Farmacias y urgencias afectadas
El colapso se ha extendido de los centros sanitarios a su ramificación informática en las farmacias. Avanzada la tarde de este martes, en los dispensarios gallegos ha dejado de funcionar el acceso a las recetas electrónicas del servicio público de salud. Así las cosas, mientras se hacía imposible obtener una receta o cita para una prueba en la consulta de Atención Primaria, en las farmacias también se iba a negro el sistema que permite a los pacientes recibir sus medicinas a través de la receta electrónica.
El problema se extiende también al servicio de urgencias 061 con las mismas limitaciones que en el resto de escenarios del colapso informático. Los equipos médicos que reciben las llamadas más urgentes de los usuarios tienen que atender esas consultas casi a ciegas: sin acceso a historias clínicas y con dificultades para conocer datos tan importantes como aquellos medicamentos a los que un usuario pudiera ser alérgico. El sistema para la recepción de alertas urgentes de este servicio (Acorde) es independiente y está funcionando con normalidad pero no así su interconexión con la red de datos de la sanidad gallega, que continúa bloqueada al cierre de esta información. De persistir la incidencia la principal herramienta para atender las urgencias durante la noche será el teléfono y el cruce de datos de viva voz.
8