Rajoy presume de recortes ante Merkel, que apoya a De Guindos para dirigir el Eurogrupo
“Seguiremos por la senda reformista”. Mariano Rajoy ha culminado su reunión informal con la canciller alemana en Santiago sacando pecho por las “reformas estructurales”, los recortes aplicados por su Gobierno desde 2011. “No nos dejaremos llevar por la autocomplacencia” ahora que “empezamos a ver los frutos de las reformas que hemos acometido”, garantizó el jefe del Gobierno de España ante Angela Merkel. Entre esos frutos, parece, está un puesto para Luis de Guindos en la presidencia del Eurogrupo.
Tras un paseo por un tramo del Camino de Santiago y una cena en una cara marisquería de la capital gallega Merkel y Rajoy comparecieron juntos ante la prensa para, esencialmente, asegurar que la receta de pasar la tijera no solo funciona, sino que es, en palabras del presidente español, la “única forma de preservar los niveles de protección social que la sociedad española merece”. No es el momento de “acabar con las políticas de austeridad”, dice Rajoy, sino de seguir por un camino que ya deriva en una “mejora sustancial de la economía”.
La canciller, que minutos antes se había fundido en un abrazo con la imagen del Apóstol Santiago en la catedral compostelana, comparte “la opinión de Mariano Rajoy”. Es un “malentendido” que “para el crecimiento se necesite más dinero”. “No es cierto”, afirma entre felicitaciones a Rajoy por las “duras reformas” aprobadas y el “gran ímpetu” a la hora de aplicarlas. El Ejecutivo del PP, dice la líder alemana, ha “creado los cimientos” para que España marche bien con un crecimiento económico que es “el primer indicio” de que se podrá disminuir el paro.
Apoyo a De Guindos, sin veto para Cañete
Entre los resultados tangibles que Rajoy saca de los actos en los que Compostela y Galicia apenas ejercieron como plató está el apoyo explícito de Alemania para dirigir la zona euro a quien hoy es ministro de Economía y, antes, dirigente de Lehman Brothers hasta que el gigante financiero quebró. Luis de Guindos “fue un ministro de Economía excelente en tiempos difíciles”, señala Merkel, por eso “cuando termine el plazo del actual apoyaremos su candidatura”.
Merkel es menos entusiasta en relación con la entrada de Miguel Arias Cañete en la nueva Comisión Europea, la otra petición de Rajoy para el nuevo organigrama comunitario. De las palabras de la canciller se desprende que el cabeza de lista de los populares españoles no sufrirá el veto alemán, pero que sea o no comisario dependerá del presidente, Jean Claude Juncker, que ya tiene sobre su mesa una carta de Rajoy “proponiéndolo como candidato”, recordó ante Merkel.
Protestas y cargas policiales
El intercambio de elogios, los paseos, el ritual apostólico y las promesas de cargos y recortes se produjeron en una Compostela tomada por la Policía, que se empleó a fondo para que las protestas no estropeasen la foto. Ni siquiera Darío Rivas, hijo del alcalde de Castro de Rei (Lugo) asesinado por los franquistas en 1936, se pudo acercar a Merkel para entregarle una carta en la que pedía que Alemania se disculpase por la colaboración con el golpe de Franco.
La carta de Rivas tuvo que quedarse en la recepción del Hostal dos Reis Católicos, donde se celebraba la rueda de prensa. Más lejos, en las calles adyacentes, tuvo que quedarse la manifestación anti troika apoyada por la Confederación Intersindical Galega y apoyada por organizaciones de la oposición gallega como AGE y el BNG. La protesta, que intentó sin éxito acercase a la Praza do Obradoiro, terminó reprimida por una carga policial en la que, entre otros, resultó lesionado el portavoz municipal del Bloque, Rubén Cela.
