Estábamos varios cientos de personas a las siete de la tarde en la calle bastante afligidos. Algunos llevaban carteles del Charlie Hebdo o con el lema “Je Suis Charlie”. Otros levantaban un lápiz o rotulador, ese arma de información masiva que tanto irrita a algunos desde tiempos inmemoriales. Había una numerosa presencia de la colonia francesa y metiendo la oreja en corrillos podías darte cuenta de que estaban bastante afectados. Todos lo estábamos, yo creo.
He de decir que este miércoles me llamó la atención la muy numerosa presencia de representantes de todos los partidos políticos y el Gobierno. Supongo que es lo que correspondía. No pude, eso sí, dejar de irritarme ante el hecho de que todo el acto giró en torno a la presencia de estos notables, hasta el punto de que los cientos de personas que allí nos encontramos en vez de estar mirando el edificio de la Embajada como al principio, acabamos girados hacia la calle, mirando el enjambre de cámaras y luces con la Puerta de Alcalá de fondo, mientras que a nuestra izquierda, el edificio de la Embajada “se quedaba solo”. Pero, insisto, no era el día.
Aparecieron por allí (que yo viera): José Luis Rodríguez Zapatero, Carme Chacón, Alfonso Alonso, Pedro Sánchez, Cayo Lara, Willy Meyer, Javier Couso, Juan Carlos Monedero, Rosa Díez, Carlos Martínez Gorriarán y supongo que más de esos y otros partidos que no llegué a ver. Estaba todo el mundo. Bueno. Una hora más tarde, ya sin políticos, el embajador se dio una vuelta agradeciendo a las personas que quedaban allí su presencia y se metió en el edificio. Fue un acto teñido por la tristeza de los presentes.
Pero hoy es hoy. Y tenemos que seguir hablando de estos temas. Y tal vez aquí en España, donde tenemos grandes déficits al respecto. Comenzando con un artículo, el 525 de nuestro Código Penal dedicado a las religiones. No se llama ya blasfemia sino escarnio. Ayer todos (nuestros Ministros incluidos), defendían firmemente la libertad de expresión por encima de todo y “bla bla bla libertad bla bla bla democracia bla bla bla…” Algo que creo choca con la existencia de este delito. Recordemos el proceso abierto al cantante Javier Krahe por algo comparable a una caricatura a un profeta. Por no recordar las recientes Operaciones Araña destinadas a “luchar” contra injurias y calumnias vertidas en redes sociales, pero que han llevado a la detención de decenas de personas y asombrosos movimientos policiales englobados en macrooperaciones de difícil justificación. Y no entro a valorar el contenido de los comentarios esos, que es algo que creo está claro. Y bueno, las recientes reformas legales con las que nos está avasallando el Gobierno del Partido Popular sin ningún consenso: la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana –la lamentablemente célebre “Ley Mordaza” que impone graves recortes en el derecho de información del ciudadano–, la reforma del Código Penal o Ley de Propiedad Intelectual. A esto le sumaría también la Ley de Tasas Judiciales, que sin tratar directamente temas de libertad de expresión e información, ayuda a la indefensión y refuerza el efecto censor de las otras.
Malos tiempos para la libertad de expresión e información en España. Un país miembro de la Unión Europea. Y en el siglo XXI.
Nunca sabremos ya lo que les parecería a los periodistas y dibujantes asesinados nuestra Ley Mordaza, o la reforma del Código Penal, o la Ley de Propiedad Intelectual, que antepone derechos de propiedad sobre otros fundamentales como el secreto de las comunicaciones o la intimidad, tan necesarios para hacer un trabajo periodístico crítico y comprometido como el suyo. En realidad, sí que sabemos lo que opinarían, pero no lo podremos volver a escuchar porque unos animales han decidido arrebatarles la vida bajo cualquier excusa.
La libertad de información y la libertad de expresión son pilares básicos de cualquier democracia, y es nuestra tarea cuidarlas y defenderlas. La tuya también.
El mejor homenaje que podemos hacer a Charb, Riss, Cabu, Wollinski, a los policías y demás asesinados y heridos ayer por defender esos –nuestros– derechos es practicarlos. Luchar por ellos. Informar, informarte. Sal a la calle cuenta lo que pasa, haz viñetas, escribe, estrimea, cuenta tu realidad, sé crítico con todo, contigo mismo, con tu Gobierno…
Haz democracia. Infórmate. Informa.
Sobre este blog
Interferencia (Wikipedia): “fenómeno en el que dos o más ondas se superponen para formar una onda resultante de mayor o menor amplitud”.