Don Mattrick deja su cargo de CEO en Zynga
Como suele decirse, Don Mattrick la ‘lio parda’ en 2013 al tomar como máximo responsable de la división de Xbox ciertas decisiones consideradas abusivas e incluso absurdas por los usuarios y buena parte de los desarrolladores independientes. Temas como que Xbox One necesitara de una conexión permanente a internet, bloquear la compra-venta de juegos de segunda mano, poner trabas al préstamo de juegos entre amigos o plantear demasiadas exigencias a los indies conllevaron que la nueva consola de Microsoft naciera de culo.
Ante la presión de los jugadores, Mattrick abandonó la compañía y el mando de Xbox cayó en manos de Phill Spencer, un ejecutivo con una visión de negocio bastante más amplia, que no duda en dialogar con los usuarios de fluidamente tratando de orientar así sus decisiones. De hecho fueron Spencer y su equipo quienes volvieron a colocar a Xbox One en la senda correcta acabando con buena parte de la visión que Mattrick tenía para ella.
¿Y qué pasó con Mattrick? El ejecutivo acabó en Zynga, famosa desarrolladora de videojuegos para navegador y móviles ahora en ruina, tras firmar un contrato ‘dorado’ que poco tiene que envidiar al de Cristiano Ronaldo o Bale. Mattrick llegó a Zynga como una estrella para ocupar directamente el puesto de CEO, desplazando así a Mark Pincus, fundador y hasta entonces presidente de la firma.
Ahora, apenas un año y medio después, desde Zynga han anunciado que Don Mattrick deja su puesto sin haber alcanzado ni de lejos el objetivo por el que fue fichado: recuperar el prestigio perdido y unos beneficios económicos de aupa que no aparecen por ningún lado. Bajo el mandato de Mattrick, se sucedieron en Zynga no pocos despidos, así como el cierre de varias de sus oficinas; pero ni de lejos han vuelto a conseguir un éxito similar al que lograron hace ya tantos años con Farmville.
Mark Pincus ha recuperado así su puesto, agradeciendo a Mattrick el esfuerzo a la hora de “liderar esta transición”. Reconoce que el ejecutivo se ha visto obligado a tomar decisiones difíciles y que eso se ha visto reflejado en el aumento de los ingresos económicos dentro del campo de los juegos para móviles.
¿Y a dónde irá ahora el bueno de Don Mattrick? Temblamos sólo de pensarlo.
