Hoy se puede visitar el cuerpo incorrupto de la copatrona de Madrid
Una vez al año, cada 17 de abril, en el convento de Nuestra Señora de la Concepción, más conocido como de Don Juan de Alarcón, se expone el cuerpo incorrupto de la beata Mariana de Jesús para veneración de los devotos de una religiosa cuyo proceso de canonización está actualmente abierto. Coincidiendo con el día de su muerte, murió a los 59 años allá por 1624, es cuando se muestran sus restos en el citado convento mercedario, que se extiende por las calles Valverde, Puebla y Barco. Entre las 10 y las 14 horas, y de 15:30 a 19:30 horas, se puede visitar. El rostro de la beata permanece oculto debido a que resultó dañado cuando horas después de su muerte el artista Vicente Carducci le hizo un molde de cera del mismo.
Ya en vida, la beata Mariana de Jesús gozó de gran popularidad entre el pueblo por su piedad y por otra serie de pseudo milagrosas intervenciones que se le atribuyeron. Cuando tres años después de su muerte se abrió el ataúd donde reposaban sus restos y se halló su cuerpo incorrupto y “exhalando una agradable fragancia”, su fama se disparó. Tiempo después, tras ser proclamada beata, el Ayuntamiento de Madrid la nombró copatrona de la ciudad, junto al mucho más conocido San Isidro y a la Virgen de la Almudena.
Cuenta la leyenda que, aunque Mariana tuvo desde muy joven clara su vocación religiosa, la oposición radical de su padre a que vistiera hábitos la llevó a desfigurarse el rostro para que el joven pudiente con quien su familia la había prometido rechazara el matrimonio, pudiendo de ese modo tan extremo poder dedicar su vida a Dios. Se dice que la joven se cortó las comisuras de los labios y se arrancó el pelo.
Para finalizar el día de la beata, una vez acabado el horario de visitas, a las 20 horas, comenzará una eucaristía presidida por el cardenal Carlos Amigo, en presencia de miembros de la Orden de la Merced, Real Capítulo de Caballeros de la Merced y Congregación de San Isidro.
Proceso de canonización
La mercedaria María Ángeles Curros es la encargada del culto a la beata desde hace 20 años y asegura que parte de la popularidad que tuvo en vida le vino por el gran trabajo que hizo con pobres, niños y cautivos. La religiosa ha explicado, tal y como recoge Madridiario.es, que el milagro que podría llevar a Mariana de Jesús a los altares es la curación de cáncer de una niña de cinco años, Mireia, quien hace 14 años tenía una tumor de Wilms con metástasis en los pulmones, en estadio IV, del que habría sanado gracias a la beata.
0