Volkswagen e-Crafter, reparto silencioso y de cero emisiones
El proceso acelerado de Volkswagen para electrificar su gama no solo se centra en su catálogo de turismos, sino que se extiende con decisión al de vehículos comerciales. Prueba de ello es la nueva versión 100% eléctrica del furgón Crafter, que con sus 170 kilómetros de autonomía se convierte en un modelo ideal para el reparto en las ciudades con tráfico restringido por problemas de contaminación.
El e-Crafter incorpora un motor eléctrico de 136 caballos y 290 Nm de par máximo, cifra esta última muy elocuente del rendimiento que puede ofrecer el vehículo especialmente cuando está cargado. El propulsor se alimenta de un paquete de baterías de iones de litio montado bajo el suelo del espacio destinado a la carga. El comercial de Volkswagen dispone de un sistema de recarga rápida CCS que permite recuperar el 80% de la energía de las baterías en alrededor de 45 minutos.
El sistema de propulsión del nuevo modelo no afecta en absoluto a sus capacidades de carga, toda una referencia en el segmento. Lo más destacado es, sin duda, el volumen del compartimento dedicado a transportar todo tipo de objetos, con 3.201 mm de longitud, 1.832 mm de anchura y 1.861 mm de altura, 10,7 metros cúbicos de espacio y hasta 1.709 kilos de carga útil.
Con respecto a las versiones turbodiésel TDI que estaban disponibles hasta ahora, el e-Crafter presenta algunos detalles distintivos como los parachoques pintados en el color de la carrocería, las bandas laterales de protección y una línea azul en la parrilla central alusiva al carácter respetuoso con el medio ambiente del modelo. Otro atributo propio son las luces de marcha diurnas en forma de C que caracterizan a los vehículos eléctricos de la marca alemana.
En el interior, lo que permite distinguirlo a simple vista son las costuras y asientos de titanio negro con el mismo ribete azul que luce la carrocería. Para quien se sienta al volante, adornado igualmente con ese detalle en color azul, el mayor cambio consiste en el medidor de potencia que ocupa el lugar reservado al cuentarrevoluciones en las versiones con motor de gasoil.
Además de una movilidad libre de emisiones, el e-Crafter proporciona un funcionamiento y silencioso que agradecerán los profesionales que lo conduzcan. Por supuesto, también ofrece un mantenimiento más económico y diversas ventajas asociadas al distintivo 0 de la DGT, como la libre circulación en episodios de alta contaminación y en zonas limitadas al tráfico o exenciones de pago en peajes.
El nuevo vehículo comercial de Volkswagen ya está a la venta por 81.130 euros (66.740 antes de impuestos). De acuerdo con el Plan Moves recientemente aprobado por el Gobierno, podría beneficiarse de una ayuda a la compra de hasta 6.000 euros.
El lanzamiento del e-Crafter se inscribe en una estrategia de la rama de vehículos comerciales del consorcio alemán que prevé la inversión de más de 1.800 millones de euros, solo en 2019, para relanzar la marca y pasar de ser “un fabricante puro a un proveedor de movilidad”, según un comunicado oficial. El plan incluye la ya suscrita colaboración con Ford, cuyo primer hito será el desarrollo de una pick-up que sucederá al actual Amarok.
En lo que atañe a la metamorfosis eléctrica de Volkswagen Vehículos Comerciales, su consejero delegado, Thomas Sedran, considera que queda simbolizada por el futuro ID. Buzz, la variante de baterías de la legendaria Serie T que se producirá en Hannover a partir de 2022. “El ID. Buzz será, sin duda, el producto más importante de los próximos años –ha indicado Sedran–. Al mismo tiempo, es un símbolo del futuro de la marca: cero emisiones, extremadamente innovador y muy emotivo” por cuanto trae al presente el espíritu del encantador Bulli.