Sánchez (C's) afirma que las salidas de Bascuñana y Cámara son “irrenunciables”
Miguel Sánchez ha sido claro, y ha repetido la consigna fijada por su partido en el ámtibo nacional para que Ciudadanos preste su apoyo a la investidura de cualquier candidato: la salida de todos los imputados de sus cargos institucionales o de partido. Ha sido en una entrevista en la emisora Onda Regional de Murcia, donde también ha anunciado que el lunes se reunirá con el PSOE. Sánchez ha insistido en que C's negociará con todos y que no entrará en ningún Gobierno, y ha advertido al PP de que si no prescinde de los imputados que siguen en sus filas, su voto a la investidura del candidato popular, Pedro Antonio Sánchez, será “no”.
Los tres primeros nombres que C's coloca en el disparadero son los de Joaquín Bascuñana, delegado del Gobierno e imputado en el caso 'Novo Carthago'; Miguel Ángel Cámara, alcalde de Murcia en funciones y secretario general del Partido Popular murciano, imputado en el caso 'Umbra'; y María Antonia Conesa, alcaldesa en funciones de Fuente Álamo e imputada en el caso 'Pagamenta'. Esos, de entrada, porque según ha expresado en Onda Regional, puede haber “alguno más por ahí” e incluso podrían surgir nuevas imputaciones antes del 15 de junio, fecha de consitución de la Asamblea Regional.
Como contrapunto a Bascuñana, Cámara o Conesa, Miguel Sánchez ha puesto a Juan Carlos Ruiz, exconsejero de Industria y Turismo, que dimitió a las pocas horas de hacerse pública su imputación en el caso 'Púnica': “Sus formas han sido exquisitas y ejemplares”, ha afirmado Sánchez.
A juicio del líder murciano de C's, su partido tiene la obligación de hablar con todos y de facilitar la gobernabilidad de la Región de Murcia, siempre y cuando aquellos que quieran obtener su apoyo cumplan con las medidas básicas de regeneración democrática y lucha contra la corrupción. En esa línea, reconoció que tiene una cita con el PSOE de González Tovar el próximo lunes, y que la reunión mantenida este jueves entre representantes nacionales de su partido y el PP murciano fue tan solo una “primera toma de contacto”.