Valcárcel propone recuperar competencias en Educación para luchar contra el “nacionalpopulismo”
Ramón Luis Valcárcel, expresidente del Gobierno de Murcia y actual vicepresidente del Parlamento Europeo, ha comparado el problema catalán con los del agua y la educación.
Además, ha propuesto “sin complejo alguno” que el Estado recupere la competencia sobre Educación en aquellas comunidades autónomas donde persiste “la distorsión de la realidad, la permanente confrontación y la incitación al odio”.
El expresidente de Murcia ha comparecido hoy en la Comisión Territorial del Congreso sobre el modelo autonómico del Congreso, donde ha repasado la situación del sistema territorial y constitucional.
Soluciones al “adoctrinamiento” en Cataluña
Para el expresidente de Murcia, la cuestión catalana sería tan “vital” como el agua y la educación, y ha propuesto recuperar las competencias de la autonomía a causa de la deslealtad.
“Si la enseñanza de la Historial, tal y como es hoy impartida en algunas comunidades, supone un riesgo para la convivencia presente y futura, hay que denunciarlo”, ha alertado.
En este sentido, ha remarcado la necesidad de implementar mecanismos que permitan acabar con el “revisionismo incendiario” que impulsan los nacionalistas. Aunque su voluntad, según ha señalado, no es “usurpar” la competencia de educación.
“Es necesario atajar, cuanto antes, los dogmas que propician el desencuentro en edades demasiado tempranas. Porque, si no lo hacemos, si hoy no actuamos con valentía, quizás mañana sea demasiado tarde para evitar la ruptura definitiva”, ha señalado.
También ha reivindicado un pacto de Estado en educación, apostando por que sea el Gobierno el que diseñe materias troncales para evitar que a través de asignaturas como historia “se abran distancias insalvables” entre ciudadanos.
Rechazo a una reforma de la Constitución
Respecto a una hipotética reforma constitucional para encajar el problema de Cataluña, Valcárcel ha rechazado una posible modificación para “contentar a quienes quieren romper España” o alimentar los “egoísmos” políticos o territoriales.
Según explica, el propio texto constitucional ya protege a los ciudadanos, como se ha demostrado con la aplicación del artículo 155.
“No hagamos de la Constitución un cajón desastre”, ha apuntado el expresidente, que cree que se debe evitar crear falsas expectativas. También ha invitado a actuar con “prudencia y realismo” antes de reformar una Constitución que, a su juicio, goza de buena salud a pesar de las amenazas del populismo y nacionalismo.
Un “nacionalpopulismo” que, desde su punto de vista, ha “prostituido” el referéndum como instrumento de participación democrática y que interpreta las leyes “a la medida de sus intereses”.
Pacto hidrológico nacional
Sobre la problemática del agua, Valcárcel ha reclamado la recuperación de un plan hidrológico nacional que prevea trasvases de las cuencas excedentes a las deficitarias, lo que sería “la absoluta plasmación del principio de solidaridad que recoge la constitución”, según ha explicado.
Como expresidente murciano, ha abogado porque el agua sea un “bien de Estado” y un derecho de todos los ciudadanos de forma que se pueda llevar “de donde sobra a donde falta”.
Financiación autonómica
En cuanto a la financiación autonómica, el expresidente ha defendido una reforma urgente en comunidades como Murcia, ya que “es imprescindible el acuerdo y que quede blindado como herramienta justa, equitativa y a salvo de vaivenes políticos”.
Ha reconocido que el actual sistema de financiación autonómica es “injusto” y “desastroso” después de que en 2005 “se quebrara” el pacto entre las comunidades.
El político murciano también se ha referido al papel del Senado. En este caso, Valcárcel ha propuesto mejorar su funcionamiento con una reforma urgente del Reglamento (no de la Constitución) para convertirla en una cámara con peso en asuntos autonómicos.
También ha defendido el papel de las diputaciones provinciales, pese a que, en 2011, en plena crisis y como presidente de una comunidad autónoma uniprovincial, abogó por su supresión.