Covite denuncia un ongi etorri en Pamplona al etarra Joseba Fernández, implicado en el último asesinato de ETA
El colectivo de víctimas del terrorismo Covite ha denunciado un ongi etorri celebrado en el barrio pamplonés de la Chantrea al etarra Joseba Fernández, que participó en el último asesinato cometido por la banda terrorista. Fernández acaba de regresar a Navarra tras quedar en libertad después de haber cumplido 11 años de condena en la prisión de Muret, en Francia. En 2010 fue condenado a 16 años de cárcel por su implicación en el asesinato del brigadier Jean-Serge Nérin en la localidad de Dammaries Les Lys, a unos 55 kilómetros de Paris. Varios miembros de ETA, que habían robado varios vehículos en un concesionario, fueron sorprendidos por una patrulla liderada por el agente Jean-Serge Nérin. En un tiroteo entre la Policía francesa y los etarras, el brigadier recibió un disparo y falleció poco después en el hospital.
En un hilo publicado en la red social Twitter, Covite ha denunciado la aparición de pancartas y pintadas en el barrio de Pamplona del que es original Joseba Fernández y al que ha regresado tras ser puesto en libertad. Fernández no fue el único etarra que participó en el tiroteo, pero sí el único que fue identificado y que ha cumplido pena de cárcel por participar en el asesinato.
Según Covite el barrio de la Chantrea amaneció este jueves “lleno de pintadas” y con una pancarta colgada de la fachada de la biblioteca y de la Plaza Arriurdiñeta.
Tras solicitar al Ayuntamiento de Pamplona la retirada de la pancarta y las pintadas, el propio colectivo de víctimas ha informado en otro tweet que este viernes ya habían sido borrados los restos del ongi etorri.
Hace unas semanas Covite había anunciado que en los primeros seis meses del año se habían registrado 64 actos de apoyo a ETA, de los cuales 10 se habían producido en Navarra. Los 64 actos representan un 51% menos de los registrados en el mismo periodo del 2020 y el dato más bajo de los últimos cuatro años.
En la presentación del informe, la presidenta del colectivo de víctimas del terrorismo incidió en “la necesidad de que desde las instituciones públicas se impulsen políticas de desradicalización violenta ultranacionalista y se haga pedagogía para deslegitimar el terrorismo y el proyecto político de ETA para así normalizar la paz y la convivencia en libertad en Euskadi y Navarra”.
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