Sánchez mantiene su silencio en medio de un fuego cruzado de presiones sobre la investidura de Rajoy
El Partido Popular y Ciudadanos aprovechan el paréntesis en sus conversaciones -a la espera de que el comité ejecutivo del PP decida el miércoles sobre el precio que la formación de Albert Rivera puso a su apoyo a la investidura de Mariano Rajoy- para redoblar su presión sobre el PSOE y que este se abstenga para favorecer un gobierno encabezado por el líder del PP.
Desde las fiestas de la Virgen de la Paloma, a la que ha pedido “que Madrid siga creando empleo”, la presidenta de Madrid, Cristina Cifuentes, -quien debe su cargo a un pacto con Ciudadanos en la Asamblea regional- ha cargado contra el PSOE, por estar “desaparecido”. “Pedro Sánchez está de vacaciones dedicado a tomar el sol y a bloquear el Gobierno”, dijo Cifuentes, pasando por alto que también el presidente de su partido, Mariano Rajoy, ha decidido tomarse unos días de descanso en la costa gallega antes de convocar a la dirección del PP para votar sobre las condiciones de Albert Rivera.
Desde ese mismo escenario en las Fiestas de la Paloma, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, ha reclamado también al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, “que no bloquee” la puesta en marcha de un Gobierno en España. La dirigente de Ciudadanos pidió también a la Virgen “que se dejen atrás reticencias y odios antiguos para que se pueda formar Gobierno” y ha recordado a Sánchez “que nadie le pide el sí” sino que se abstenga “para que pueda haber un Gobierno de España”. “Le pedimos un comportamiento responsable”, insistió.
Su reclamación sigue la línea del líder de su partido, Albert Rivera, quien el domingo -antes incluso de saber si el PP acepta sus condiciones “irrenunciables”-, escribió un artículo en el diario EL PAÍS titulado a “A mis compatriotas socialistas” en el que reclamaba la abstención del PSOE en una eventual investidura de Rajoy para la que todavía no hay fecha.
No son los únicos mensajes que Pedro Sánchez ha recibido en las últimas horas. Desde Izquierda Unida, Alberto Garzón reclama que los socialistas no caigan “en un juego de trileros, en el que no está claro dónde está la bolita”. “Pedimos al PSOE que no se resigne y abra una vía de un Gobierno de Pedro Sánchez que puede contar con más simpatía en el Parlamento y, desde luego, en la calle”. Una reivindicación similar hizo llegar este fin de semana a Sánchez su rival en las primarias José Antonio Pérez Tapias, partidario también de que el PSOE diga no a Rajoy e intente buscar apoyos para formar Gobierno.
Por su parte, el secretario general del PSOE en Castilla y León ha ironizado sobre la decisión que debe adoptar el comité ejecutivo del PP esta semana sobre las medidas contra la corrupción que propone Ciudadanos: “Mira que si empataban como la CUP en Cataluña y tiene que desempatar Rita Barberá, será un escenario muy curioso. Rajoy lo que quiere es ganar tiempo y presionar al Partido Socialista. Es puro teatro”.
La dirección del PSOE, entretanto, mantiene su decisión de votar en el Congreso de los Diputados contra la candidatura de Mariano Rajoy, si finalmente se presenta a la investidura en la Cámara Baja. Para reafirmar esa decisión, los socialistas presentaron el pasado viernes en el registro del Congreso una solicitud para crear una comisión de investigación en la Cámara que investigue los casos de corrupción que sacuden al PP y cita entre los comparecientes al propio Rajoy.