Así fue cómo se gestó la portada más icónica de la música y de la década de los 90

El 23 de mayo de 1991 comenzaba la sesión fotográfica para el que sería uno de los discos musicales más destacados de la década de los 90, a nivel comercial, pero también de crítica, con la revista Rolling Stone colocándolo en el puesto del mejor álbum de ese período. Se trataba de las imágenes de ‘Nevermind’, el segundo trabajo del grupo Nirvana, que una vez publicado significaría el salto a la fama del máximo exponente del grunge.

‘Nevermind’ de Nirvana pasó a la historia siendo el 31º álbum más vendido de la música, y su portada pasaría a ser la más icónica de la escena musical, por delante de otros trabajos destacados como ‘The Dark Side of the Moon’ de Pink Floyd, según una encuesta de Perspectus Global en 2021.

Kurt Cobain ideó la icónica portada de ‘Nevermind’ de Nirvana

Un 23 de mayo de 1991 fue cuando el fotógrafo Michael Lavine acudió a tomar instantáneas del grupo Nirvana en el Aaron Studios de Los Ángeles, pero de ellas no saldría la que daría vida a la icónica portada, que fue obra de Kirk Weddle.

Fue Kurt Cobain el que daría con la idea de la portada con el bebé bajo el agua persiguiendo un billete de dólar americano mientras veía un documental en la televisión sobre partos bajo el agua, y quería una foto de un parto para la portada del que sería el segundo disco de Nirvana y el que los catapultaría a la fama.

Esta idea la trasladó el líder de la banda al sello discográfico Geffen, que al recibirla un joven recién graduado y que acababa de empezar se propuso como el encargado de llevarla a cabo. Se trataba de Robert Fisher, quien lo reconocía en una entrevista a The Guardian: “Les pregunté si podía trabajar en el proyecto. Nadie en la compañía podía imaginar que el grupo fuera a dar semejante pelotazo, pero el álbum me impresionó en cuanto escuché una copia de prueba”.

Se puso manos a la obra e indagó en una biblioteca por fotos de partos bajo el agua, pero ninguna de ellas resultaba adecuada para ser portada de un disco musical, siendo algunas de ellas demasiado gráficas, y fue cuando llegaron a la idea del bebé en una conversación con la banda.

La historia detrás del famoso bebé bajo el agua como portada de Nirvana

En una conversación informal con la banda llegaron a la idea de que el anzuelo que persiguiera fuera un billete de dólar, pero lo complicado era lograr una fotografía bajo el agua, que a principios de los 90 era tecnológicamente complicado. A través de un catálogo dieron con Kirk Weddle, que se publicitaba como especialista en fotografías de “humanos sumergidos”.

Kirk Weddle se mostró escéptico en un principio por las dificultades que implicaba fotografiar un bebé bajo el agua, pero aceptó y optó hacer una sesión con unos amigos y su pequeño, Spencer Elden, quien sería finalmente el elegido.

Spencer Elden tiene una relación complicada con ser el bebé de la portada, incluso interpuso una demanda judicial por abuso sexual, que fue desestimada por dejar pasar mucho tiempo para afirmar ser haber sido explotado, pero también ha posado bajo el agua para emular la icónica fotografía, que también fue tomada a los propios miembros de la banda Nirvana.