El estudio de videojuegos Activision Blizzard acepta pagar 50 millones para cerrar el caso contra su cultura machista
La desarrolladora de videojuegos Activision Blizzard ha llegado a un acuerdo extrajudicial para cerrar el mayor escándalo machista de la historia de los videojuegos. El estudio responsable de algunas de las sagas más importantes del sector, como World of Warcraft, Guitar Hero, Diablo o Call of Duty fue acusado en 2021 de fomentar una cultura tóxica contra sus empleadas e incluso pasar por alto tocamientos, insultos o amenazas. Más de dos años después, ha aceptado pagar 54 millones de dólares (unos 50 millones de euros) para dar carpetazo legal al asunto.
El acuerdo, ratificado entre el Departamento de Derechos Civiles de California y la empresa, destina 46 de los 54 millones de dólares a compensar a las trabajadoras que sufrieron discriminación salarial y por el techo de cristal impuesto para dificultar sus ascensos entre 2015 y 2020. Los siete millones restantes se destinarán al pago de la multa y las costas del litigio, ha informado el estado californiano en un comunicado.
La desarrolladora ha conseguido no obstante que en el texto del acuerdo se refleje que “ningún tribunal ni ninguna investigación independiente ha corroborado ninguna acusación” sobre “acoso sexual sistémico o generalizado en Activision Blizzard”. Esto tumba una de las acusaciones más graves del Departamento de Derechos Civiles de California, que afirmó que las empleadas de la desarrolladora estaban “sometidas a un acoso sexual constante.”
El pacto también documenta incluye que las investigaciones no han encontrado pruebas de que su consejo de administración o su consejero delegado, Robert Kotick —contra quien se dirigían las acusaciones de las demandantes—, cometieran ninguna irregularidad.
El escándalo sí se llevó por delante a varios directivos de la empresa, como su entonces presidente, J. Allen Brack, así como el máximo responsable de Rercursos Humanos, varios responsables del juego de Diablo 4 y un diseñador de World of Warcraft. Algunos de los comportamientos machistas de la cúpula se hicieron virales, como un vídeo sobre una mesa de debate de World of Warcraft en la que Brack y otros responsables de este juego se mofaban de la pregunta de una joven sobre la hipersexualización de los personajes femeninos en el videojuego. Era el año 2010.
El acuerdo pone fin a dos años de litigio que han supuesto un duro golpe reputacional para Activision Blizzard, que era el estudio independiente más importante del sector antes de que se confirmara su adquisición por parte de Microsoft por unos 65.000 millones de euros. La histórica compra ha sido finalmente aprobada por los reguladores de competencia tras más de un año de pesquisas.
Se considera que el escándalo de machismo en Activision Blizzard fue un factor clave en su adquisición por parte de Microsoft, ya que hizo que el precio de sus acciones se derrumbara. La multinacional fundada por Bill Gates anunció el acuerdo de compra en febrero de 2022 tras un 2021 en el que la desarrolladora de videojuegos sufrió un titular tras otro sobre su cultura empresarial machista.
Activision Blizzard también se compromete en el acuerdo a contratar a una consultora externa para evaluar sus políticas de igualdad y la formación de los trabajadores sobre ella, así como a “distribuir los fondos sobrantes del acuerdo entre organizaciones benéficas dedicadas a la promoción de la mujer en las industrias de los videojuegos y la tecnología o a la sensibilización sobre cuestiones de igualdad de género en el lugar de trabajo”, reza el comunicado del Departamento de Derechos Civiles de California.
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