Sindicatos denuncian el “mercantilismo” del Gobierno andaluz al deshacerse de su red de residencias vacacionales públicas
La residencias de tiempo libre en Andalucía eran, al menos hasta ahora, “lugares de vacaciones pensados para que las personas trabajadoras y sus familias puedan tener un lugar de vacaciones de calidad a precios económicos” pero la Junta de Andalucía ha decidido desahacerse de ellas por el “agujero económico” que supone a las arcas públicas, según la valoración dada públicamente por la consejera de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco. Los sindicatos CCOO, UGT y CSIF se han concentrado este lunes para criticar el “enfoque mercantilista” del Gobierno andaluz en relación a un servicio que está dirigido a los colectivos más desfavorecidos, amén de dejar “en la calle” a unos 400 trabajadores.
Tanto el secretario de Acción Sindical de la Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de CCOO de Andalucía, Paco Fernández, y el coordinador del Sector Autonómica de FSC, Pablo López del Amo, han explicado a este periódico que, en su opinión, los servicios públicos nunca suponen un déficit sino que son “una inversión pública para el estado del bienestar de nuestra sociedad”. Por eso se oponen “frontalmente” al cierre de las residencias y reivindican su “función social”.
Los representantes sindicales han acudido este lunes a una comisión de revisión del convenio que rige al personal laboral de Administración General de la Junta de Andalucía, donde le han expuesto al secretario general de Administración Pública, a la directora general de Recursos Humanos y Función Pública, y a la viceconsejera de Empleo qué va a pasar con los empleados afectados y cómo se van a amortizar las plazas que ocupan en estas residencias, de cuya situación se han ido enterando por la prensa “sin negociación alguna” y que está generando “una gran incertidumbre” entre los trabajadores.
Ventas, concesiones y devoluciones
La Consejería de Empleo ha explicado que la Consejería de Hacienda será la encargada de poner a la venta las instalaciones de Aguadulce (Almería) y Pradollano (Sierra Nevada, Granada), estimando el valor de cada edificio en unos 10 millones de euros. Por su parte, las residencias de Marbella (Málaga) y La Línea de la Concepción (Cádiz) serán explotadas en régimen de concesión, mientras que las instalaciones de Siles (Jaén) y Punta Umbría (Huelva) serán devueltas a los ayuntamientos dueños de los inmuebles.
Empleo, en ese sentido, apunta el “modelo de éxito” de la residencia de Cádiz, con cuya venta la Junta ingresó 11,8 millones de euros. Cerró en 2007 durante la etapa socialista pero, según argumentan las fuentes, fue el Gobierno del PP el que la sacó a concurso e hizo que se convirtiera “en un moderno hotel en primera línea de playa cuando antes era un edificio abandonado”. La Junta, paralelamente, ha asegurado que mantendrá el programa 'Conoce tu tierra' que permite disfrutar de vacaciones a personas con menor nivel de renta.
La reunión
Según fuentes sindicales, los representantes de los trabajadores han lamentado la “mala gestión de la Junta durante años para justificar su privatización”, diciendo incluso que promotores inmobiliarios vienen visitando las residencias. “Esto estaba planificado desde hace tiempo y se han dejado deteriorar los centros intencionadamente”, aseguran las fuentes, que apuntan que se ha pedido plantear una negociación con la representación de trabajadores en cada de una de las provincias en las que hay un centro tiempo libre.
Los representantes de la Junta han afirmado que no se va a negociar el cierre de las residencias ya que es una decisión tomada del Gobierno autonómico. Se trataría, según la Administración, de iniciar un proceso para negociar la situación del personal, que no debe alargarse más allá de tres semanas. Hay un total de 357 plazas en estos centros, de las cuales 164 son empleados discontinuos, que pasaría a año completo tras la reubicación.
Se podría negociar que las personas que estén cobrando complementos se reubicarán preferentemente en plazas que tengan condiciones similares, ha trasladado la Junta, que asegura que se va a mantener un “programa de vacaciones” a través de la Consejería de Inclusión Social. En cuanto a la reubicación de vacantes dotadas no ocupadas dice la Junta que se comprometen a que no se perderán puestos dotados, si bien se han emplazado a abordar mayores detalles en una próxima reunión entre ambas partes.
Concentración de protesta
Por su parte, los sindicatos representantes de la mayoría del personal laboral de Administración General de la Junta han querido mostrar este mismo lunes un “enérgico rechazo” al cierre de unos centros que “son patrimonio de todos los andaluces y andaluzas para ponerlas en manos de unos pocos que van a rentabilizar unas instalaciones que deberían realizar una importante función social”. CCOO, UGT y CSIF recuerdan al Gobierno andaluz que “no es una empresa privada que ha de generar beneficios sino que su obligación es prestar un servicio público de calidad a la ciudadanía y fundamentalmente a los colectivos más vulnerables” como personas perceptoras de pensiones no contributivas, personas jubiladas, mayores de 60 años, personas con discapacidad reconocida y todas aquellas cuyos ingresos no superen el salario mínimo interprofesional, así como personas integrantes de comunidades andaluzas existentes fuera del territorio andaluz o víctimas de violencia de género, entre otros.
“Nos parece lamentable que la Administración argumente que estos centros tienen pérdidas económicas, cuando es el propio Gobierno de la Junta de Andalucía el responsable de una pésima gestión que, sin duda, ha ido encaminada a justificar esta decisión privatizadora de un servicio público”, argumentan. La Junta, detallan, “lleva dejando que estos centros se deterioren y no han publicitado e informado a la ciudadanía de que pueden hacer uso de estas instalaciones”. Los sindicatos lamentan que la Junta haya informado “a algunos medios de comunicación antes que a la representación del personal y a los propios trabajadores y trabajadoras del cierre de estos centros”.
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