Rajoy y Sánchez hacen parada obligada en Andalucía en la recta final de campaña
Los líderes de las fuerzas tradicionales, Mariano Rajoy (PP), Pedro Sánchez (PSOE) y Alberto Garzón (IU) acuden en los últimos días de campaña a Andalucía a reclamar el voto para las suyos. Movilizar al indeciso, o hacer volver a sus siglas a los que optaron en las autonómicas por Ciudadanos y Podemos, resulta esencial para mantener el poder municipal. En unas elecciones cuyos resultados marcarán el curso político hasta las inminentes generales, lograr el sufragio de la comunidad más poblada deviene en esencial para convertirse en el partido más votado en el cómputo global. Y Sevilla, eminentemente socialista en la provincia y absolutamente popular en la capital, se convierte en ejemplo de las batallas electorales que se libran en toda Andalucía y toda España.
Mariano Rajoy participa este miércoles en Sevilla en un mitin junto al alcalde Juan Ignacio Zoido. Conservar Sevilla es uno de los objetivos clave para los populares en Andalucía. Los sondeos pronostican hasta ahora un empate técnico entre PP y PSOE que el voto indeciso puede romper. A Zoido no le ha faltado apoyo nacional durante esta campaña, ha tenido por aquí a la ministra Fátima Báñez, a la vicepresidenta Sáenz de Santamaría y ahora a Mariano Rajoy. Con un desplome más que previsible del voto a los populares -pasarían de la aplastante mayoría absoluta de sus 20 concejales a 11 ó 12- lo importante para ellos ahora es situarse como la fuerza más votada.
El de este miércoles será el segundo acto del presidente Rajoy en Andalucía durante la campaña, después de abrirla el día 8 en Málaga junto al alcalde Francisco de la Torre. Málaga es el gran fortín de los populares en Andalucía pero su veterano alcalde ve peligrar también la mayoría absoluta. Porque el Partido Popular se está jugando en estas elecciones perder la importante cuota de poder que hasta ahora ha logrado en Andalucía, los gobiernos municipales. Los populares vencieron hace cuatro años por mayoría absoluta en 23 de los 29 ciudades de más de 50.000 habitantes. Repetir esos resultados se antoja ahora imposible. Elobjetivo pues es mantener el tipo.
Y a la misma hora en que Rajoy acompaña al alcalde de Sevilla, Susana Díaz ofrece el primer y único acto electoral que compartirá en los días de campaña con su secretario general, Pedro Sánchez. Ambos han elegido para el reencuentro Alcalá de Guadaíra, una ciudad de 75.000 habitantes a 16 kilómetros de Sevilla. Alcalá, junto a Dos Hermanas, constituyen los dos principales núcleos del poder municipal socialista en el entorno de Sevilla. O lo han sido hasta ahora, porque Antonio Gutiérrez Limones, alcalde desde 1995, ha perdido paulatinamente el respaldo popular hasta gobernar actualmente en minoría. El PSOE fue el partido más votado en 101 de los 105 municipios de Sevilla en las pasadas elecciones autonómicas, pero continúa el goteo de la pérdida de votos que se acelera en los grandes núcleos urbanos donde irrumpen con fuerza los partidos emergentes. Los socialistas se esfuerzan estos días en frenar la pérdida de votos y atraer a los indecisos.
Antes de parar en Sevilla, Pedro Sánchez visitará otra de las provincias que acostumbra a dar buenas noticias al PSOE elección tras elección, Huelva. Consideran, además, que hay serias opciones de recuperar el poder en su capital después de 20 años en manos del PP. Sánchez ha recorrido Andalucía en estos 15 días de campaña mucho más que en las pasadas elecciones autonómicas en las que solo dejó ver en dos ocasiones. El miércoles pasado visitó las provincias de Granada y Jaén; el jueves, las de Cádiz y Málaga (mientras Susana Díaz viajaba a Asturias), y el viernes, la de Almería. En ninguno de estos actos coincidió con la secretaria general del PSOE andaluz.
Tampoco Alberto Garzón y Cayo Lara han parado de visitar Andalucía durante estas dos semanas. Garzón da un impulso final en estos tres últimos días de campaña a su ruta andaluza. Este miércoles parará en su ciudad, Málaga; para el jueves reserva Córdoba, el símbolo del poder municipal de IU hasta que hace cuatro años cayó en manos del PP; y el cierre de campaña lo hará en Sevilla junto al candidato Daniel González y el coordinador andaluz Antonio Maíllo. Izquierda Unida, en horas bajas también en Andalucía, se juega el ser o no ser en Sevilla. Las últimas encuestas le dan un solo concejal en una ciudad en la que gobernaron durante ocho años junto al PSOE.