La Virgen del Pilar luce su manto floral en Zaragoza en una jornada multitudinaria y con protestas por los retrasos
Miles de personas ataviadas con trajes regionales y flores en las manos han participado desde el amanecer en la Ofrenda a la Virgen del Pilar que ha teñido de color y emoción el corazón de Zaragoza, durante una jornada soleada que ha sorteado las previsiones de lluvia.
Un total de 1.158 grupos, un 9,35 % más que en 2024, participan en el acto central de las Fiestas del Pilar, que ha comenzado a las 6.30 horas con la agrupación 'Costureras Malotas' y cerrará a las 23.30 horas el voluntariado municipal.
Este año se ha incorporado a la Ofrenda una alfombra floral realizada por la prestigiosa Asociación de Alfombristas do Corpus Christi de Ponteareas, de Pontevedra, cuya instalación ha arrancado a las 7.30 horas y se ha lucido en el corazón de la plaza.
Para colocar los millones de flores que recibe la Virgen del Pilar este 12 de octubre trabajan más de 400 personas de la sociedad municipal Zaragoza Cultural, otros servicios municipales y miembros de seguridad.
A las 8:55 horas ha salido Lorena junto a su perra Mía, que animadas por un concurso de trajes baturros para animales se han vestido igual para pasar por la Virgen y pedir “muchos más momentos juntas”. “Yo lo quiero compartir todo con ella. Es mi compañera y me pareció una buena idea que viniera. Yo tenía el traje desde hace tiempo, pero quise buscar telas parecidas para ir iguales”, ha señalado.
La gran afluencia de oferentes ha provocado numerosos retrasos y protestas. La propia responsable de Zaragoza Cultural, María Uriol, ha tenido que salir a la palestra para “hacer un llamamiento al respeto” a los participantes, para “que se guarde el horario asignado y evitar los retrasos que se dan en individuales”. Si en un principio, según ha apuntado, el recorrido “duraba entre 45 y 52 minutos”, a medida que se han acumulado las personas este se ha ido “ralentizando”: “Se están colando los grupos”, ha señalado.
A este acceso de individuales se llega por el extremo de la plaza del Pilar en el que se sitúa la basílica de La Seo. “Llevamos más de tres horas y no avanzamos, queremos avanzar”, han apuntado participantes en Aragón TV.
También se han vivido momentos de tensión cuando la corporación se ha reunido a las puertas de la casa consistorial para guardar un minuto de silencio por la presunta agresión sexual a una menor la noche anterior en el recinto de Valdespartera. “A la fila, a la fila”, han empezado a gritar numerosos oferentes.
El sonido de las castañuelas en manos de niños, el paloteado de localidades aragonesas, los claveles en ramos de color, los trajes de sevillanas y las familias reunidas para cumplir con la tradición han sido también protagonistas de una cita llena de devoción, identidad y deseos. “Yo a la Virgen le pido salud, mucha salud. Venimos de una época un poco mala y no me gustaría que faltara nadie al año que viene”, ha dicho emocionada Jimena, quien ha llevado por primera vez el traje de su madre, que ya no está, y pendientes de su abuela.
Mientras ha sonado en una rondalla ‘A la orilluca del Ebro’, el pequeño Miguel, de seis años, ha saltado de alegría agarrado de la mano de su abuelo y ha pedido “cantar como ellos” el próximo año.
La nicaragüense Darling ha reconocido que estar en este acto “es como un sueño hecho realidad” porque, tal y como ha recordado, antes de llegar a Aragón “había visto la Ofrenda a través de las redes sociales y pensaba que algún día estaría”. “Siempre lo soñé, dije que iba a estar aquí y se ha hecho realidad. Desde que vine a España hace seis años, vine aquí. La gente en Aragón es muy cariñosa y amable. Estoy encantada”, ha compartido.
Con el mismo entusiasmo ha hablado el peruano Paul Izquierdo, que lleva en Zaragoza 20 años y para él ser del país invitado este año es “un gran motivo para estar contentos y emocionados”. “Para nosotros es un placer pasar y que la cultura de Perú se muestre, sobre todo a Zaragoza y a España”, ha agregado.
La imagen de la Virgen corona una estructura metálica de seis niveles y una altura de 15,5 metros y el manto de este año está confeccionado con flores blancas y en rojo, como siempre, la Cruz de Lorena.
Tras contabilizar a las 10.30 horas más de 25.000 oferentes, la gerente de Zaragoza Cultural, María Uriol, ha explicado que la media de recorrido está entre 46 y 51 minutos, porque “hay grupos a los que les había tocado a última hora del día que están pasando por la fila individual”.
En torno a las 12.00 horas, dos aviones de transporte A400M y cuatro cazas F-18 que han participado en Madrid en el desfile aéreo de la Fiesta Nacional han sobrevolado la plaza del Pilar y han dejado una imagen espectacular que se repite cada año, al volar a baja altura y pasar por encima de una Virgen del Pilar ya cubierta de flores.
El operativo para este acto cuenta con la participación de 30 jardineros y 64 auxiliares de jardinería, así como con 175 personas que colaboran en el montaje y desarrollo del desfile a los que se suman 260 voluntarios y personal de Protección Civil, Cruz Roja, Bomberos, Policía Local y Nacional.
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