Enmiendas al jerez

“Esto es lo que pasa cuando estás apoyando al Gobierno, no te dejan presentar enmiendas”. La senadora del PP por Teruel Mamen Azuara se arrancaba así hace apenas unos días. Los políticos también son humanos y muchos de ellos tienen arranques. Como el resto de los mortales. Arranques de sinceridad, de bailoteo, de independencia -como la ya ex-presidenta del Partido Popular en Euskadi, Arantza Quiroga - y hasta de celebración -como el grupo parlamentario popular que ha hecho balance de legislatura con un video tipo la serie “Urgencias” - sin Clooney- en el mismísimo Congreso de los Diputados. Y con barril y grifo de cerveza incluido.

Así es la política. Una mañana de otoño, te encuentras en el Pignatelli siendo Javier Lambán, el presidente socialista de Aragón, y teniendo que pedir con una mano casi mil millones de euros para ir tirando al Gobierno del PP de Mariano Rajoy y, con la otra mano, teniendo que pedir a tu sostén de Podemos, Pablo Echenique, que vote a favor tu primer proyecto de presupuestos. Todo en el mismo día.

Así es la política. Como este mismo miércoles, que se votaron las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado 2016 en la Cámara Territorial (Senado) y cuando llegó la hora de Aragón (de votar las 111 enmiendas sobre Aragón para ser precisos) pasaron cosas inusitadas. Los senadores de Podemos y Ciudadanos, los nuevos partidos políticos que abanderan nuevos modos de hacer política, no apoyaron ninguna de las 111 enmiendas sobre Aragón, que en realidad son propuestas políticas concretas sobre el terreno y con presupuesto anexo. Ni una. Y dicen las malas lenguas que se abstuvieron o votaron en contra, según qué grupo político fuera el autor. Es decir, que Ciudadanos votó en contra de las presentadas por el PSOE y se abstuvo en las presentadas por el PAR. Y Podemos se abstuvo en las enmiendas presentadas por el PSOE y votó en contra de las del PAR. Qué bien! Ha llegado la nueva política. Muy nueva, sí. Viva el ciudadano, la contaminación por lindano, las mejoras en las carreteras y, sobre todo, la despoblación. La política es así. ¿No les suena de algo?

Que Facebook haya incorporado siete botoncitos con nuestros estados de ánimo dice mucho de lo complicado de los tiempos que vivimos. Del me gusta vamos camino del: “estoy triste, me enfada y hasta lloro”. Confusos tiempos, desde luego, muy alejados y muy diferentes de la época victoriana en la que lo que importaba era que había tazas de té diseñadas para que a los hombres no se les estropeara la gomina del bigote.

Hace unos días, Putin y Berlusconi se metieron en un lío por descorchar en Crimea un Jerez de 1775. La botella estaba valorada en 150.000 dólares y es (era) propiedad estatal y un legado cultural. El magnate y ex presidente italiano fue el que preguntó a la directora del museo si podían probarlo pero contra quien han abierto proceso judicial penal ha sido contra ella.

La política es así. No dejo de preguntarme si llegaron a probarlo y a qué rayos sabría ese jerez. Como las enmiendas.