Cuatro meses de la nueva Ordenanza de Movilidad de Zaragoza: 1.000 multas a usuarios de patinetes y solo 5 a ciclistas

La polvareda que levantó en verano la nueva Ordenanza de Movilidad Urbana de Zaragoza, la primera en España que prohíbe a ciclistas y usuarios de patinete eléctrico circular sin seguro obligatorio y, en el caso de los patinetes, también sin casco ya se traduce en cifras. Entre el 11 de septiembre y el 22 de enero la Policía Local ha puesto más de un millar de multas por estos motivos, pero la variación es muy amplia entre un tipo de transporte y otro.

De esta forma, las 135 sanciones interpuestas a conductores de vehículos de movilidad personal (VPM, patinetes) en este tiempo contrastan con las apenas cinco a usuarios de bicicleta. Y también con los 870 conductores de VPM denunciados por circular sin casco para bicicleta homologado o superior. Se trata de unas 250 sanciones al mes durante el cuatrimestre en que el nuevo reglamento lleva vigente.

En su respuesta a la petición formulada a través del portal de Transparencia del Ayuntamiento de Zaragoza, la Policía Local también precisa que, aunque las sanciones las interponen los agentes, la instrucción de estas multas -dentro del ámbito de la mencionada Ordenanza de Movilidad- corresponde a la Oficina Jurídica de Medio Ambiente y Movilidad del Consistorio, encuadrada en un área distinta. 

La nueva normativa, que entró en vigor en septiembre tras ser aprobada semanas antes, generó una gran controversia, especialmente por la obligatoriedad de suscribir un seguro de responsabilidad civil para poder circular en bicicleta por el municipio, una medida que estas organizaciones consideran “sin precedentes en ninguna ciudad de España ni en Europa”. A esto se sumó el hecho de que, en respuesta a una reclamación de la Justicia de Aragón, el propio Consistorio reconoció que no tenía competencias en la relación con los seguros de vehículos.

Por esta circunstancia, las organizaciones ConBici, Bielas Salvajes y el Colectivo Pedalea ha formalizado un recurso contencioso administrativo para tratar de paralizar la medida.

En estos momentos, el recurso sigue en pie. Laura Vergara, gerente de ConBici, ha querido lanzar un llamamiento a los ciclistas -el ámbito de competencia de su asociación- sancionados por no llevar seguro de responsabilidad civil para que se pongan en contacto con alguna de las tres entidades, de manera que puedan ayudarles con las alegaciones. “Es todo un despropósito absoluto”, ha denunciado Vergara, quien a la rapidez con la que han empezado a poner multas por la nueva Ordenanza de Movilidad contrapone lo sucedido con la que regula la zona de bajas emisiones en la ciudad: “Esa misma noche ya establecieron una moratoria de 18 meses”, lamenta la responsable de ConBici.

“Es palmaria la falta de competencia, no puede regular un seguro para un vehículo en una vía urbana, la competencia es estatal y es exclusiva”, declaró en octubre Pablo Muñoz, el representante jurídico de estas asociaciones, Pablo Muñoz. El también exconcejal de IU en el Ayuntamiento apuntó a su vez la “falta de competencia” de la propia Policía Local para “hacer el control sobre la tenencia o no de un seguro de responsabilidad civil obligatorio”, que desde su punto de vista corresponde “a los cuerpos del Estado”.

La nueva Ordenanza expone de forma textual, respecto a las dos ruedas, que “para conducir una bicicleta se dispondrá de la correspondiente garantía de responsabilidad civil mediante un seguro específico para la circulación de estos vehículos que cubra los posibles daños a usuarios y a terceros o en su defecto un seguro de hogar que cubra esta contingencia. El conductor de la bicicleta deberá portar copia de la póliza en soporte papel o soporte informático”. El redactado es similar en otro punto, pero para VMP.

El objetivo declarado por el Ayuntamiento es mejorar la seguridad. Para los colectivos ciclistas, sin embargo, el perjuicio al uso de la bici y el patinete eléctrico es palmario: según detectaron apenas cuatro semanas después de que la Ordenanza hubiera entrado en vigor, el tránsito de estos vehículos por un punto concreto de la ciudad en el que se estableció un control alcanzó una caída del 20%.