“Nos encantaría que el Festival Sónica se integrase dentro de la vida diaria de Castro Urdiales como un elemento más de la ciudad”

Hace mes y medio Castro Urdiales recibió la noticia de que este verano sería escenario de un festival de música con artistas de primer nivel. La celebración del mismo, que arranca este viernes, corrió como la pólvora en redes sociales y de boca en boca, al tratarse de una cita inédita para esta localidad. Y es que el Sónica, que así ha sido bautizado el evento, congregará en diferentes conciertos a Vetusta Morla, Kase.O, Lola Índigo o Bad Gyal, junto a otros músicos del panorama local y regional.

“Nos encantaría que el Festival Sónica se integrase dentro de la vida diaria de Castro Urdiales como un elemento más de la ciudad”. Este es el deseo que manifiesta Ernesto Castañeda, promotor del evento, en una entrevista con elDiario.es a pocas horas de que se enciendan los focos y la música comience a inundar el Estadio Riomar, ubicación escogida para las actuaciones.

Este empresario pone en valor “la ilusión y la alegría” que ha generado el festival en el municipio, así como el impacto económico que supondrá para el mismo. “La información que nos llega es que hay días en los que en los hoteles está todo completamente agotado, es imposible encontrar una habitación donde quedarse en kilómetros a la redonda”, apunta, remarcando que han mantenido reuniones con ONGs y con los portavoces de las asociaciones de hostelería y de comerciantes.

“Hemos tratado de incorporarnos lo antes posible a la vida diaria de la ciudad, tratando de hacer ver que las puertas están abiertas”, explica, destacando de nuevo que han recibido “mucho cariño, alegría e ilusión”. Y es que, según recuerda, en el momento en el que durante la rueda de prensa se destapó el cartel de los artistas y se puso el vídeo de presentación, entre los presentes se desató “un aplauso espontáneo que no es habitual”, antesala de la buena acogida que ha tenido el evento en el municipio.

Y es que Castro Urdiales, como resalta Castañeda, “además de ser un lugar maravilloso, con mar, playas y un muy buen nivel de servicios y comunicaciones, se encuentra en un lugar estratégico”. “Está en una zona de la región en la que quizá se estaba programando menos, y nos pareció un municipio interesante porque al ser limítrofe puede invitar a otro tipo de público”, subraya.

De esta forma, la empresa organizadora puso en marcha un festival con el objetivo de “combinar distintos estilos” dando cabida a artistas locales. “Consideramos que la escena local es muy importante y que es una forma de colaborar en la visualización de todos esos artistas”, afirma. No obstante, todo el proceso ha estado marcado por la pandemia y los continuos cambios en las restricciones en función de la evolución epidemiológica.

“Es una incertidumbre permanente, cada minuto o cada hora pasa algo, es una montaña rusa vertiginosa”, sostiene, reconociendo que otros años, cuando se acercan los eventos, “te preocupan otro tipo de cosas como la venta de entradas o la climatología, algo que ahora casi está en un segundo plano”. Precisamente sobre la venta de entradas, Castañeda asegura que “el resultado es más o menos el que cabía esperar”, pero que con el aumento de los nuevos contagios en la conocida como quinta ola “se ha frenado”. “Lo hemos notado de manera importante”, lamenta.

Por último, el organizador del Sónica se despide esperando que el festival se desarrolle de la mejor manera posible y no cierra la puerta a que el año que viene tenga una segunda edición: “Cuando uno inicia este tipo de eventos espera que dure muchas ediciones, e indudablemente se tendrán que dar las circunstancias para que eso se pueda producir así”, concluye.

“Mucha ilusión y muchos nervios”

“Estamos muy contentos de albergar un festival de este calibre, con mucha ilusión y, al mismo tiempo, con muchos nervios”, expresa Gorka Linaza (PSOE), concejal de Festejos, Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Castro Urdiales a elDiario.es. Se trata, según recuerda, de un evento que lleva tiempo sin hacerse en la localidad por lo que desde el Consistorio han tenido que “ponerse las pilas desde el primer momento en todos los sentidos”: acondicionar las instalaciones y trabajar coordinados con la productora y el Gobierno de Cantabria.

“Lo ideal ahora es que salga todo bien y que podamos disfrutar de un evento seguro, que es lo que más preocupa a todo el mundo”, subraya. “Demostramos de nuevo que estamos apostando por la cultura y por eventos de esta magnitud”, señala Linaza, reconociendo que tienen ante sí “una prueba de fuego”. “Vamos a tener todas las cámaras mirando hacia lo que pase en el estadio de Riomar, pero se van a cumplir todas las medidas sanitarias”, asegura.

Finalmente, el edil hace hincapié en que esta cita es importante para Castro porque “atrae gente y mueve la economía”. “Este tipo de festivales que llevaban mucho tiempo sin celebrarse en nuestro municipio nos ponen en el mapa, y eso es lo que queremos, siempre con iniciativas y cosas positivas”, concluye.