La tercera ola prosigue su escalada en Cantabria con otros dos fallecidos y una presión hospitalaria que no deja de crecer

Más muertes, contagios diarios que no bajan y una presión hospitalaria que no deja de crecer. Este es el panorama actual de la tercera ola de la pandemia en Cantabria, que prosigue su escalada, tras una jornada con dos nuevos fallecidos, una mujer de 76 años y un varón de 90, que elevan la cifra total de decesos COVID a 464.

Además, la comunidad ha detectado este jueves 151 nuevos positivos, que continúan incrementando el número de casos activos, que ya son 3.372. De ellos, 216 están ingresados en los diferentes hospitales de la región, 14 más que hace 24 horas, de los cuales 38 se encuentran en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), cuatro más.

Así pues, Valdecilla cuenta con 155 pacientes, Sierrallana con 33, Laredo con 27 y Tres Mares con uno, y la ocupación de camas sigue al alza, con un 14,7%, aunque la que más crece y, a su vez más preocupa, es la de las UCI, que ya roza el 35% (34.9). Por su parte, el resto de contagiados (3.156) está pasando la enfermedad en cuarentena domiciliaria.

Pese a estos parámetros que reflejan la delicada situación que atraviesa Cantabria, la incidencia acumulada a 14 días se mantiene por debajo de 400 y muy inferior a la media nacional. A día de hoy, según los datos facilitados por la Consejería de Sanidad, es de 394 casos por cada 100.000 habitantes, y el porcentaje de positividad de las pruebas realizadas para detectar el virus es de 8.6%.

En este sentido, Cantabria ha realizado hasta el momento un total de 409.122 test, lo que se traduce en un cómputo de 70.381 por cada 100.000 habitantes.