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El Archivo Histórico de las minas de Almadén ya es Bien de Interés Cultural

Archivo de minas Almadén

Francisca Bravo Miranda

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha declarado oficialmente el Archivo Histórico de las Minas de Almadén y Arayanes como Bien de Interés Cultural en la categoría de colección. Se trata, según informó el consejero de Educación, Ángel Felpeto, del primer bien mueble en recibir esta declaración en Castilla-La Mancha. El archivo consta de material cartográfico, bibliográfico y documental de gran importancia para conocer la historia de la explotación minera de la localidad ciudadrealeña.

El Ejecutivo ha decidido otorgarle este nivel de protección al Archivo para evitar una “posible disgregación o traslado parcial o total” del archivo, según explicó Felpeto, quien señaló que ya han ocurrido “otras circunstancias” similares en España. “Con esto se protege el bien histórico”, aseguró, destacando que se trata de una fuente de información muy importante para conocer la explotación de las minas y también el estado de conservación “excepcional” del mismo.

El Archivo de las Minas de Almadén y Arrayanes se generó de forma paralela a las actividades mineras e industriales de la zona. La primera referencia que se ha encontrado relativa al mismo, según el Gobierno de España, se encuentra en un certificado de 1653, así como una Real Orden de 1785 en la que se trataba la la remisión de la documentación más antigua de la Contaduría de las Minas al Archivo de Indias.

La organización científica del Archivo comienza en la década de 1930 y el primer archivero fue Fernando Rodríguez Guzmán, quien estableció el Archivo Administrativo, el Archivo Histórico, el Archivo de Planos y la Biblioteca Obrera. Entre 1953 y 1963 se hicieron dos grandes transferencias de los documentos conservados en el Archivo de las Minas en Almadén. La primera se realizó en 1962 y comprendía toda la documentación anterior a 1900. La segunda transferencia se llevó a cabo en 1963 y abarcaba la documentación producida entre 1900 -1936. La última transferencia de documentación al Archivo Central del Ministerio de Hacienda se realizó en 1984, que a su vez la remitió al Archivo General de la Administración.

A partir de esa fecha la documentación empezó a remitirse a Almadén y el servicio quedó en manos de administrativos y subalternos que se limitaban a recibir los documentos. Sin embargo, en 1999 se crea la 'Fundación Almadén-Francisco Javier de Villegas' que se plantea la recuperación de la documentación de la actividad de las Minas y poner el patrimonio en orden.

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