Castilla-La Mancha, la líder del pago “desproporcionado” en facturas de la energía
Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia son las regiones con mayor grado de afección según los indicadores que la Asociación de Ciencias Ambientales ha publicado en su último informe 'Pobreza, vulnerabilidad y desigualdad energética: Nuevos enfoques de análisis'. En este estudio, al igual que en los publicados en 2014 y 2007, la organización se basa en los principales indicadores por comunidades autónomas, como el porcentaje de hogares con gastos “desproporcionados” en el pago de las facturas de la energía o la incapacidad para mantener los hogares a una temperatura adecuada.
En este sentido, Castilla-La Mancha ejerce el triste liderazgo en el número de hogares que deben destinar una parte “desproporcionada” de los ingresos a las facturas energéticas. Por ejemplo, un 67,5% de los hogares destina un 5% de sus ingresos a estos menesteres, siendo la cifra más alta de todas las Comunidades Autónomas, y muy por encima de la media española que llega al 45,5%. En el caso de los hogares que destinan más del 20% a estas facturas, la región triplica la media nacional y se adelanta con creces a otras comunidades, ya que un 9% de los hogares deben hacer frente a pagos de este tipo.
De hecho, la region se mantiene siempre por encima de la media española en los indicadores que determinan si se sufre o no pobreza energética. Entre ellos se encuentra el indicadaor LIHC que se refiere a 'Low income - high cost', es decir, bajos ingresos y costes muy altos. Es, según indica el informe, parte de la metodología oficial de Reino Unido, según el cual un hogar se encuentra en pobreza energética si el gasto en energía doméstica que ayude a un nivel de confort adecuado está por encima de la mediana del gasto en energía de los hogares encuestados.
Según este indicador, Castilla-La Mancha es la región con más pobreza energética de toda España con un 19,9% muy por encima de la media española que es de un 9,6% y muy lejos también de las otras regiones. La segunda región que presenta una pobreza energética más alta, según este indicador, es Murcia, con un 11,9%, al igual que Castilla y León. Lo mismo ocurre con los nuevos enfoques usados por el estudio, los llamados 'MIS', que se refieren a los niveles de ingresos mínimos aceptables para garantizar el bienestar de una persona.
Además, el estudio señala que existe un 14,2% de los hogares en la región que es incapaz de mantenerse en una temperatura adecuada, mientras que el 8,1% tiene retrasos en el pago de los recibos de calefacción, electricidad, gas y agua. Finalmente, en el 16,7% de los hogares encuestados se han encontrado goteras, humedades o podredumbre en la vivienda. Todos estos datos se encuentran por encima de la media española, si bien no son los más altos de todas las comunidades autónomas.
En el estudio no se menciona, eso sí, el Plan de choque contra la pobreza energética que puso en marcha para este pasado invierno el Gobierno de Castilla-La Mancha, el que finalmente no ocupó siquiera todo el presupuesto considerado, que usaba como referencia un total de diez mil hogares en la región. El documento advierte, eso sí, de que la pobreza energética sigue siendo una realidad que afecta a una proporción “significativa” de hogares en España, pero advierte también de que el análisis sigue siendo “preliminar de resultados brutos”.