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Un reconocido estudio en pacientes con Covid es visto como “intrusismo” por fisioterapeutas de Castilla-La Mancha

Personal sanitario atiende a un paciente en una UCI

elDiarioclm.es

12 de septiembre de 2025 19:58 h

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El pasado 7 de septiembre, la página web del Gobierno regional publicaba un artículo en el que daba a conocer que la Unidad de Rehabilitación de Cardiología del Hospital de Toledo ha recibido un premio al mejor artículo publicado sobre readaptación funcional en pacientes con COVID persistente.

Se trata de un proyecto que, para el Colegio de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha (COFICAM), “lejos de ser motivo de orgullo”, supone “otra muestra de la promoción del intrusismo profesional y la desinformación que la fisioterapia regional lleva sufriendo de manera sistemática por parte del Ejecutivo autonómico”.

En dicho artículo, galardonado por la Sociedad Española de Cardiología, se expone que un trabajo de investigación liderado por el cardiólogo del Hospital Universitario de Toledo Alejandro Berenguel, evalúa la eficacia de un programa de ejercicio físico terapéutico en la mejora de la capacidad funcional de los pacientes con síndrome de COVID persistente y la intolerancia al ejercicio.

“El resumen que cualquier lector puede hacer tras leer esta noticia es la realización de un proyecto que ha aplicado ejercicio físico terapéutico por medio de entrenadores especializados (graduados en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte -CAFyD-)' en pacientes que han acudido a la Unidad de Rehabilitación Cardiaca del Hospital Universitario de Toledo, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha”, apunta el Colegio de Fisioterapeutas.

En concreto, dicho estudio en el que han participado un total de 50 pacientes a lo largo de 15 meses, evalúa la eficacia del programa diseñado e implementado por entrenadores especializados (graduados CAFyD) en la mejora de la capacidad funcional valorada mediante ergoespirometría (VO2) de los pacientes con síndrome de COVID persistente e intolerancia al ejercicio, que es uno de los síntomas más frecuentes y que reduce la calidad de vida de las personas“.

Sin embargo, afirman que este proyecto -RECOVER- “no se ha llevado a cabo en las instalaciones del Sescam, sino en las instalaciones de la Escuela de Gimnasia de la Academia, ni ha sido llevado a cabo por la Unidad de Rehabilitación Cardiaca, sino por distintas personas, entre las que se encuentran algunas que tienen relación con el hospital, y otras que no”. “Pero donde está claro que las competencias profesionales han sido vulneradas de nuevo, es en este enlace, correspondiente a la publicación galardonada”, agrega COFICAM.

El ejercicio físico terapéutico para pacientes

“Todo lo indicado evidencia que, de nuevo, el Gobierno autonómico se ha saltado toda la normativa vigente en la actualidad”, afirma sobre este proyecto el Colegio de Fisioterapeutas, que subraya que “ya existe una figura sanitaria que realiza el ejercicio físico terapéutico para pacientes: el fisioterapeuta”. “El perfil de graduado CAFyD no se encuentra dentro de la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias”, aseveran.

“Pero es que, además, durante el año pasado, tras la modificación del Personal Estatutario del Servicio de Salud de Castilla-La Macha, se expresó la negativa a la inclusión de dicho perfil”, agregan desde el Colegio, que recalca que “la investigación no está exenta de cumplir las normativas estatal y autonómica”.

De otro lado, cuestionan si, de cara a la realización del estudio, “se permitió el acceso a las historias clínicas de los pacientes a personal no sanitario”, así como también ponen en entredicho que “el Comité de Ética de Investigación Clínica haya permitido que la intervención terapéutica sea realizada por profesionales no sanitarios en un centro no sanitario”.

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla-La Macha considera que, “en ciencia, no todo vale”. “Estamos hablando de pacientes y, por tanto, está en juego la salud de las personas y, mientras otras comunidades autónomas, como es el caso de Cantabria, blindan a sus profesionales, el Gobierno de Castilla-La Mancha fomenta el intrusismo profesional con el riesgo que conlleva para toda la ciudadanía”, asevera. Por todo ello, indican que han remitido escritos a distintos estamentos del Gobierno Regional, con el fin de que “se lleve a cabo una rectificación”.

Defensa de los equipos multidisciplinares

Ante las críticas del COFICAM, el cardiólogo Alejandro Berenguer defiende, en declaraciones a este medio, el papel fundamental del ejercicio físico como “terapia eficaz en la readaptación funcional de pacientes con COVID persistente”. Berenguer subraya que parte del origen de los síntomas post-COVID radica en una disfunción muscular, concretamente de sus mitocondrias, lo que convierte al ejercicio en un tratamiento potencial.

Asimismo, Berenguer enfatiza que la ciencia avanza gracias a la formación de equipos multidisciplinares que colaboran para ofrecer lo mejor al paciente. “El ejercicio físico se ha incorporado como una terapia más, ya que muchos procesos, como los infartos o las insuficiencias cardíacas, se recuperan gracias a programas de ejercicio implementados en hospitales”, subraya.

En este sentido, señala que históricamente, los fisioterapeutas han realizado estas funciones por ser “lo más parecido que hay” a un experto en entrenamiento, a pesar de que la formación académica curricular de estos, subraya Berenguer, no incluye formación específica en este ámbito.

Sin embargo, en los últimos años, los expertos en entrenamiento, graduados en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (Cadyf), han mostrado interés en tratar a personas con patologías. Estos profesionales llevan años realizando formaciones específicas de posgrado para poder entrenar a pacientes, lo que ha generado un conflicto, tachado a menudo de intrusismo, indica el cardiológo.

Berenguer apunta que en este estudio no participaron fisioterapeutas ni personal sanitario, porque se realizó fuera del hospital; los médicos buscaban a los pacientes y luego el entrenador los entrenaba, precisa, al tiempo que defiende que la solución es “trabajar de la mano y de manera conjunta, montando equipos multidisciplinares”. “No se trata de tirarnos los trastos”, afirma, deseando que el tono sea de “tender manos” y evitar polémicas.

Berenguer destaca que, a nivel local, en Castilla-La Mancha (CLM) queda mucho por recorrer. A pesar de contar con una unidad de rehabilitación cardíaca muy avanzada, la región está “coja de metodología de entrenamiento” que estos programas podrían implementar.

Finalmente, el cardiólogo argumenta que no se debe desdeñar el conocimiento del personal de Cadyf. Señala que en Toledo, entre un 10 y un 15% del personal que trabaja en hospitales no es sanitario (como biólogos, etc.), preguntando retóricamente por qué no incorporar a otro personal no sanitario en estos equipos.

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