Toledo se convierte en el primer municipio de la región en regular el arte callejero

Toledo es el primer municipio de la región que va a llevar a cabo una regulación de las actividades artísticas en los espacios públicos de la ciudad. Esto va a ser posible gracias a la Ordenanza de Arte en la Calle que fue ratificada en el pleno municipal de la pasada semana y que entrará en vigor una vez se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

El texto ha contado para su elaboración con la participación de artistas que ofrecen sus espectáculos, principalmente, en las calles del Casco Histórico, donde a partir de ahora se establecerán un total de 16 escenarios. Para actuar en ellos, los interesados tendrán que contar con una autorización por parte del Consistorio que se renovará trimestralmente.

En concreto, 12 de los espacios se sortearán entre los solicitantes y podrán contar con dos artistas por puesto, siempre que se trate de distintas disciplinas. Así, los otros cuatro espacios se destinarán a los artistas itinerantes que, al igual que en el resto de emplazamientos, tendrán también un horario regulado para poder actuar.

Estos espacios son: las escaleras mecánicas de los remontes de Recaredo y Safont, la puerta de Bisagra, la puerta Llana de la Catedral, la cuesta del Arco de Palacio, el Arco de la Sangre, la zona norte de la plaza de Zocodover, Cuatro Calles, Santo Tomé, la plaza del Conde, el puente de Alcántara, el puente de San Martín, la plaza de Juan Mariana, el paseo de la Vega, la explanada del Corralillo y la plaza del Salvador.

No obstante, indica la ordenanza, se podrán incrementar dichos espacios previo dictamen de la comisión informativa correspondiente y la aprobación de la Junta de Gobierno Local, sin que sea necesario para ello modificar dicha ordenanza. La superficie que podrá ocuparse en los citados espacios no será superior a los dos metros cuadrados (m2) para actuaciones individuales o en pareja o de 5 m2 para grupos.

Los horarios de actuación establecen un período estival, del 1 de abril y hasta el 30 de septiembre, en el que se podrán llevar a cabo los espectáculos desde las 10.00 hasta las 14.00 horas y desde las 18.00 a las 22.00 horas, mientras que en el horario invernal las actuaciones podrán llevarse a cabo desde las 10.00 hasta las 14.00 horas y desde las 16.00 a las 20.00 horas.

En esta nueva normativa municipal se define también al arte callejero como aquellas expresiones artísticas de toda índole que tengan como espacio de realización la vía pública, siendo realizados por una o varias personas de forma provisional o ambulante y que no requieran de infraestructuras, escenarios u otro tipo de instalaciones análogas, no teniendo por sus características la consideración de espectáculos mayores.

Las solicitudes para conseguir las autorizaciones trimestrales tendrán que tramitarse entre los días 1 y 15 del mes inmediatamente anterior al que comience el trimestre, los cuales se establecen de enero a marzo, de abril a junio, de julio a septiembre y de octubre a diciembre. Es decir, si por ejemplo se quiere con una autorización de octubre a diciembre, los artistas tendrán que realizar la solicitud del 1 al 15 de septiembre.

Prohibición de usar animales y de requerir de forma activa la aportación de donativos

Una de las curiosidades de esta normativa, que precisa también de la responsabilidad de los titulares autorizados de mantener en perfecto orden y limpieza los espacios utilizados, es que los artistas no podrán requerir de forma activa la aportación de donativos, por lo que tendrán que limitarse a situar junto a ellos un pequeño objeto donde pueda ser depositada voluntaria y libremente la donación.

Además, la ordenanza prohíbe también la utilización de animales mientras se desarrolle la actividad, excepto en el caso de animales guías para invidentes, así como tampoco podrán intervenir en las actividades menores de la edad prevista en la normativa laboral vigente.

También puntualiza este reglamento que cuando el Ayuntamiento prevea actuaciones culturales, lúdicas, festivas o recreativas en la zona concedida a los artistas, esta quedará suspendida hasta la conclusión de las actividades previstas.

“Dar vida a la ciudad, armonizar y regular el arte en las calles”

El propósito de esta normativa, explicó el concejal de Juventud, Diego Mejías, durante la presentación que realizaron de la misma, es “dar vida a la ciudad, armonizar y regular el arte de Toledo en sus calles”. “Va a ser muy positivo para la ciudad y queremos compaginarlo con el descanso y la convivencia de los vecinos”, apunto durante una presentación en la que estuvo acompañado por la concejal de Cultura, Nuria Cogolludo, y varios de los artistas que también se han implicado en la elaboración de la normativa.

“Hemos tenido contacto directo con los artistas y hemos contado con su opinión sobre esto. La plaza del Salvador va a ser uno de los espacios de esta ordenanza, además sirvió como escenario del Festival Cohete”, señaló el edil.

De su lado, la edil de Cultura recalcó que la puesta en marcha de esta normativa ha sido “un ejemplo de participación y transparencia”. “Han participado. Han participado colectivos, grupos municipales, se han estudiado muy meticulosamente las alegaciones de esta ordenanza que apoya la cultura en la ciudad y en sus calles, así como compartir los espacios con los artistas que quieren participar en este proceso”.

“Queremos que sirva también en la difusión y en el apoyo a todos estos artistas. Sirve como base legal para dar cobertura a estos artistas”, subrayó Cogolludo.

“Lo ideal es no regular porque debería funcionar de otra manera”

De su lado, uno de los artistas que asistió a esta presentación, el poeta y cantautor Carlos Ávila, señaló que “lo ideal no es regular las cosas porque deberían funcionar de otra manera, pero para eso pasarán miles de años, y si es que el ser humano está en el planeta Tierra”. “Toledo es un museo al aire libre, eterno o sempiterno, pero tiene que convivir con otro tipo de arte que es el efímero, como el que hacen dibujantes, músicos o actores teatrales en las calles”.

Así, Ávila agregó que mientras que el propio ser humano no pueda llevar a cabo este tipo de actuaciones sin necesidad de una normativa, “tendrá que haber una regulación y una ampliación de libertades en ese sentido”. “En este punto, estamos a favor de la iniciativa del Ayuntamiento de Toledo”, agregó antes de de dar paso a la interpretación que hizo otro de los artistas presentes de la canción ‘Redemption song’ (canción de la redención).