Poco más de la mitad de los trabajadores de Isover ratifican el acuerdo y ponen fin a los paros
Cinco semanas de paro en la sede de Isover Saint Gobain en la localidad alcarreña de Azuqueca de Henares han llegado a su fin, después de que el 55% de los trabajadores ratificasen el acuerdo que alcanzó el sindicato Comisiones Obreras con la dirección de la empresa. El sindicato ha anunciado que la ratificación de más de la mitad de los empleados señala que entienden que un acuerdo sobre convenio colectivo es “bueno y necesario”.
Entre los compromisos que ha alcanzado Isover Saint Gobain con los trabajadores es la puesta en marcha de un convenio colectivo, que regule las condiciones laborales de la plantilla hasta el año 2017. Entre las normas se encuentra una subida del sueldo, en relación al IPC y a la rentabilidad de la empresa, con lo que se podrá garantizar una “mejora del poder adquisitivo” mientras el convenio esté vigente. Por otra parte, la planta incluirá también la “ultractividad”, además de incluir las condiciones del convenio incluso hasta un año después de que caduque, mientras se alcance un acuerdo.
En temas de flexibilidad, Isover Saint Gobiain se ha comprometido a que durante la vigencia del nuevo convenio no se aplicarán medidas que vayan más allá de las ya acordadas y que, en términos de subcontratación, se mantendrán las directrices que se señalan en el convenio de Cristalería, tal como ha indicado Comisiones Obreras. En este sentido, la empresa deberá llegar a un acuerdo con los trabajadores para subcontratar personal.
Si bien CCOO ha señalado que no es el “mejor de los acuerdos posibles”, ha señalado que el convenio alcanzado era necesario para zanjar el conflicto, después de cinco semanas de lucha de los trabajadores por sus derechos laborales. La fábrica de Azuqueca de Henares acoge la mayoría de los trabajadores de Isover Saint Gobain, 180 de 205, y se dedica a la fabricación de aislantes técnicos para diversos campos.
El Consejo Ciudadano de Podemos en Azuqueca de Henares ha reiterado su apoyo a la lucha de los trabajadores de Isover, señalando que los paros tenían como fin impedir que se dejarán sin efecto cláusulas del convenio colectivo como la regulación de la jornada o el desligamiento de la subida salarial del IPC. Podemos señaló que las medidas adoptadas por la empresa, como modificar la política de subcontratación recogida en el convenio colectivo, eran un “grave ataque” a los derechos del convenio.
