Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La antigua cúpula de los Mossos señala a Puigdemont por asumir un 1-O con violencia

Forn, Trapero y Puigdemont, en una rueda de prensa por los atentados del 17A

Oriol Solé Altimira

Josep Lluís Trapero, Ferran López y Juan Carlos Molinero eran el número uno, dos y tres de los Mossos d'Esquadra durante el otoño soberanista y un año y medio después sus carreras dentro de la policía catalana han tomado caminos diversos debido a los avatares del procés. En sus declaraciones como testigos en el juicio del procés han coincidido en apuntalar una de las tesis de la Fiscalía y han afirmado bajo obligación de decir verdad que Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y Joaquim Forn sabían que el 1-O se producirían choques violentos y que pese a ello priorizaron continuar con la votación.

Si los políticos lo sabían era porque los tres uniformados, junto al resto de la jefatura de los Mossos, les trasladaron un aviso sobre posibles incidentes entre policías y votantes durante una reunión el 28 de septiembre en el Palau de la Generalitat. El aviso y el ruego para suspender la votación se dirigió a Puigdemont, Junqueras y Forn, pero la respuesta más clara se la dio el president, han coincidido los mandos. Trapero, López y Molinero han otorgado a Junqueras y Forn un papel secundario en el encuentro, si bien no los han separado de la línea marcada por Puigdemont.

Según Trapero, la respuesta de Puigdemont a las advertencias se limitó a decir a los mandos que el 1-O “hicieran el trabajo que tuvieran que hacer”. López y Molinero, que han comparecido tres semanas después que su antiguo jefe, han ido más allá y han asegurado que Puigdemont estaba conforme con el escenario violento y que lo quería usar para su plan independentista.

“Trapero dijo 'president, ojalá el domingo no tengamos que lamentar una desgracia', y Puigdemont respondió que si el 1-O se producía una desgracia procedería a declarar la independencia”, ha recordado Molinero este jueves. “Puigdemont respondió que si se producía este escenario que preveíamos [incidentes y disturbios entre votantes y policías], él en ese mismo momento declaraba la independencia”, sostuvo López el miércoles. A diferencia de Trapero, a día de hoy Molinero y López –que lideró los Mossos bajo el 155– siguen en puestos de responsabilidad del cuerpo, aunque distintos a los que tenían el 1-O. El primero es comisario de Movilidad y el segundo, adjunto al nuevo jefe de los Mossos, el comisario Miquel Esquius.

Consultada por este diario, una portavoz de la oficina que Carles Puigdemont tiene como expresident de la Generalitat ha declinado valorar las declaraciones de López y Quevedo. La única versión que ha dado Puigdemont sobre la reunión del 28-S fue en una entrevista en Rac-1 el pasado mes de marzo, cuando negó que las advertencias incluyeran “una escalada de violencia” pero reconoció que los Mossos expusieron un “análisis de riesgos”. En su declaración como acusados, Forn y Junqueras negaron que las advertencias policiales fueran de “un escenario de violencia generalizada”. El exconseller de Interior limitó la preocupación de los mandos a “incidentes puntuales”.

Contra el Govern y contra Pérez de los Cobos

Las palabras de los dos mandos son una letra que encaja a la perfección con la música que describe la Fiscalía en su escrito de acusación por rebelión, donde sostiene que los políticos catalanes contemplaban un escenario violento para conseguir la independencia. Sin embargo, los jefes de la policía catalana han hecho desafinar con claridad la otra pata de la rebelión de los fiscales, las supuestas directrices políticas impartidas desde el Govern para que los Mossos facilitaran el 1-O y con sus “17.000 agentes armados” se convirtieran en la potencial fuerza de choque para imponer la independencia.

Y es que los cinco mandos de los Mossos –también los comisarios Emili Quevedo y Manel Castellví– han seguido un mismo relato sin fisuras para explicar el malestar que tenían por las declaraciones públicas de Forn en las que el exconseller situaba a la policía catalana del lado de la votación cuando en realidad lo que tenía que hacer era impedirla.

Con todo, todos los jefes policiales han coincidido en que en privado Forn respetó su labor y no les dio nunca ninguna indicación sobre el operativo del 1-O. “Tampoco se lo hubiéramos permitido”, quiso dejar claro Trapero. “En ningún momento nos planteamos hacer un operativo para complacer” al Govern, ha abundado Molinero.

El celo con el que los jefes de los Mossos durante el 1-O han defendido su autonomía respecto del Govern y su acatamiento de las órdenes de jueces y fiscales se ha repetido para repeler los ataques al dispositivo de la policía catalana para impedir el referéndum lanzados por los responsables de Policía y Guardia Civil.

Los más contundentes han sido López y Molinero, que no han dudado en señalar al coordinador policial y exalto cargo de Interior, el coronel Diego Pérez de los Cobos, como el máximo responsable del dispositivo que la Fiscalía ve orquestado para permitir el 1-O. López fue interlocutor directo de Pérez de los Cobos y afirmó que el coordinador “validó” todos los pasos del dispositivo ante del 1-O, incluida la pareja de mossos en cada colegio el día de la votación (el denominado “binomio). Pérez de los Cobos dijo que se enteró el 9 de octubre.

Molinero le ha secundado y ha afirmado que “en ningún momento” López trasladó al resto de la jefatura que en las reuniones de coordinación que se sucedían desde el 25 de septiembre “se cuestionara que los Mossos desplegaran binomios en los colegios”. “Fue una propuesta de despliegue de Mossos aceptada por el responsable del dispositivo, que era el coronel”, ha apostillado.

Péres de los Cobos fue el mando policial más duro a la hora de criticar el dispositivo de la policía catalana, que llegó a tildar de “estafa”. Los adjetivos “ineficaz”, “pasivo” o “ineficiente” se repitieron en las declaraciones de los responsables políticos y policiales de Guardia Civil y Policía para referirse a la policía catalana el 1-O. Por contra, los mandos de los Mossos han evitado calificar el dispositivo de la Guardia Civil y la Policía Nacional. Las defensas de los acusados tampoco se lo han preguntado.

Etiquetas
stats