Puig monta un acto exprés en Alicante para dar respuesta a la pérdida del principal ayuntamiento del PSPV
Dos años y diez meses en el poder no son nada comparado con los veinte que han trascurrido intentando alcanzarlo. El PSOE de Alicante vuelve a su hábitat natural, la oposición, y lo ha hecho sin solución de continuidad. El voto en blanco de la regidora tránsfuga Nerea Belmonte, con la que socialistas, Guanyar y Compromís habían tratado de pactar un acuerdo para restituirle el sueldo, como ella demandaba, ha permitido a un PP “reconquistar” la alcaldía y ha dejado al PSOE noqueado.
Para levantar la moral, el máximo responsable de los socialistas valencianos acaba de convocar a la agrupación a un almuerzo nada más aterrizar de su viaje a China y Japón. El restaurante Sorell de Alicante será el lugar donde Ximo Puig tratará de dar explicaciones este domingo. Y no lo tendrá fácil. Su secretario de Organización, José Muñoz, fue la persona que designó para llevar la voz cantante en las negociaciones previas a la sesión de investidura. ¿Cómo explicar el fracaso?
El número 2 del PSPV marcó el camino. “Belmontazo”. Manolo Mata fue rápido señalando a la culpable del cambio de color en Alicante. Sin embargo, fuentes socialistas esperan que se deslice al menos algo de autocrítica. Otras en cambio creen que la dirección del PSPV-PSOE seguirá con su discurso de que “la culpa ha sido de otros”. Este jueves hubo Comisión Permanente de la Ejecutiva de Alicante y se oyó alguna voz reclamando la celebración de una asamblea extraordinaria para analizar los motivos por los que Eva Montesinos no ostenta la vara de mando. Todo se quedó en una tímida propuesta. En lugar de cónclave habrá almuerzo.
Y mientras tanto, desde el sector ‘sanchista’ ya han empezado a surgir las primeras críticas. Se lamentan de la decisión adoptada por el partido de colocar al número dos de Gabriel Echávarri como candidata a la alcaldía. Entienden que si, en lugar de Eva Montesinos, se hubiera apostado por la regidora Sofía Morales, “una persona de mayor consenso”, y ponen como ejemplo que lograra como edil de Hacienda convencer a Guanyar, Compromís y el concejal tránsfuga para aprobar los presupuestos municipales de este año.
Al mal trago por perder la alcaldía de la segunda ciudad de la Comunitat, Puig puede que tenga que sumar también la debacle en Elche. Este sábado está convocada la asamblea en la que cerca de 500 militantes elegirán a su próximo secretario general. El hombre de confianza de Puig, Carlos González, no va a optar a la reelección como secretario por las pocas posibilidades que tiene de salir elegido. En su lugar, el líder del PSPV-PSOE ha colocado a la concejala Ana Arabid, que tiene visos de ser arrollada por el sector ‘sanchista’ que representa en la provincia Alejandro Soler, 12 años secretario y alcalde de 2007-2011.