Estrella Morente: Aún hay mucho que hacer por los derechos de las mujeres

La cantaora Estrella Morente, protagonista de “La guerra de las mujeres”, que se representa en el Festival de Mérida, subraya que “aún hay mucho que hacer por los derechos de las mujeres”, en cuestiones por ejemplo como la violencia machista, y se muestra dispuesta a aportar su “granito de arena”.

La artista (Las Gabias, Granada, 1980) protagoniza en estos días en el festival emeritense una versión del desaparecido dramaturgo Miguel Narros de la obra “Lisístrata”, de Aristófanes, que pone de manifiesto el poder sexual femenino para parar las guerras.

Acerca del papel de las mujeres en la sociedad actual, Morente, en una entrevista con Efe, ha aseverado que cree “profundamente en las mujeres, en su sensibilidad y en su necesidad de avanzar en la vida, ”porque “alguien que es capaz de dar vida a un ser humano de una manera va buscando más caminos y esperanza”.

A su juicio, durante toda la historia las mujeres siempre lo han hecho “por instinto” y ha habido muchas a lo largo de la historia. Reconoce que “hay muchísimas cosas por hacer por los derechos de las mujeres”. “Lo que esté en nuestras manos hay que hacerlo para aportar nuestros granitos de arena y nuestras voces”, recalca.

En concreto, se ha referido a las víctimas de la violencia machista y ha explicado que “no hay más que poner un telediario o coger un periódico, lo que yo hago a diario”.

“Hace un tiempo huía cuando veía algo dañino en las noticias y ahora me pongo una coraza para hacerme fuerte -insiste-. Últimamente, escucho más las noticias que música, porque no hay que ponerse una venda” ante la situación de las mujeres.

No obstante, ha puntualizado que se debe tener “mucho cuidado” para evitar que los niños no presencien “la situación que vive el mundo, que es tremenda”.

Morente ha reclamado que se avance en la educación y la preparación de las personas “frente a las catástrofes que estamos viviendo”.

En cuanto a su debut en Mérida, la artista andaluza reconoce que afronta el reto “con unos sentimientos a flor de piel y con la responsabilidad lógica de un estreno tan importante que nace en Mérida”.

“Las opiniones son importantes al decir si el niño (en referencia a esta obra de teatro que estrena en las tablas del Teatro Romano emeritense) es guapo o feo, pero lo que trasciende es que el niño nazca”, máxime cuando “es un proyecto importantísimo que nos ha llenado de energía, de ilusión y de la sensación del trabajo”.

Respecto a cómo ha afrontado la interpretación, resalta que “el trabajo sin dificultad no es trabajo”, ya que “las cosas que se trabajan y conllevan un sacrificio saben de otra manera”.

“Mi clave es siempre el trabajo y, luego, el resultado puede ser más o menos exitoso, pero la sensación del esfuerzo no te lo quita nadie”, ha añadido la artista.

En cuanto al protagonismo del flamenco en el espectáculo emeritense, que, según su director, José Carlos Plaza, llega al 95 por ciento de la obra, ha afirmado que, aunque casi todo se fundamente en el cante, el texto de la versión de Narros implica que “debe haber una actitud, una teatralidad y una expresión”.

“No vale cantarlo bonito sino en un contexto teatral, con unas posiciones en el escenario. Cuando los hombres dicen, 'Mujeres, qué teméis, qué tramáis y qué pretendéis de nosotros', es ópera en toda regla”, ha añadido.