El Prado viaja a Estados Unidos con los grandes maestros de sus colecciones
Obras de grandes maestros como El Greco, Velázquez, Ribera, Goya o Sorolla han viajado por primera vez a Estados Unidos para formar parte de la exposición Retrato de España. Obras maestras del Prado, en el Museum of Fine Arts de Houston.
Esta exposición, en la que se exhiben cien obras de los artistas mejor representados en el Prado, se enmarca en el programa internacional del museo que tiene como objetivo mostrar sus colecciones fuera del territorio nacional.
Patrocinada por BBVA Compass, se trata de la primera vez que las obras del Prado viajan a Estados Unidos en una exposición que se podrá visitar en uno de los museos más destacados del país, el Museum of Fine Arts de Houston (MFAH), en el estado de Texas, hasta el 31 de marzo de 2013.
Retrato de España. Obras maestras del Prado, que llega a Houston tras su exhibición en la Queensland Art Gallery de Australia, ofrecerá al público norteamericano un recorrido por la historia de España y el arte español, desde el siglo XVI hasta el XIX.
Este recorrido estará formado por ochenta pinturas y veintidós obras sobre papel de los artistas más importantes de la pintura europea, principalmente maestros españoles como Goya y Velázquez pero también artistas extranjeros que trabajaron para la corte española incluyendo a Rubens y Tiziano.
Junto a estos nombres figuran también los de El Greco, Ribera, Zurbarán, Murillo, Paret, Van der Hamen, Meléndez, Vicente López, Federico de Madrazo, Rosales, Fortuny o Sorolla.
El recorrido, dividido en tres grandes apartados, se inicia con La pintura en un estado absolutista, espacio dedicado a los años 1550-1770. Retratos, escenas mitológicas, pintura religiosa y bodegones de artistas como El Greco, Velázquez y Zurbarán muestran el esplendor del Siglo de Oro en España cuando el imperio estaba en pleno auge.
En esta sección, el arte cortesano está representado por los retratos de Isabel Clara Eugenia y Magdalena Ruiz de Sánchez Coello y Felipe IV en traje de cazador de Velázquez, entre otros, mientras que la pintura religiosa se contempla a través de La Inmaculada Concepción de Aranjuez de Murillo o Cristo muerto sostenido por un ángel de Alonso Cano.
El bodegón está ampliamente retratado por obras de Juan van der Hamen y León, Luis Meléndez o Juan de Arellano.
El apartado 1770-1850. Un mundo que cambia refleja como los artistas españoles de finales del siglo XVII y principios del XIX se convirtieron en cronistas de los distintos estamentos de la sociedad española.
Destaca en esta época la obra de Goya, del que se incluirán algunos de sus retratos neoclásicos como los de Manuel Silvela y la marquesa de Villafranca y una importante selección de estampas de las series de Los Caprichos (1799), Los Desastres de la Guerra (1810-1815) y Los Disparates (1815-1823).
El último espacio se dedicará a 1850-1900. Los umbrales de la España moderna que mostrará como la transición hacia el Romanticismo conllevó que se reflejaran más los gustos de la clase media, incluyendo paisajes, retratos, escenas históricas y religiosas y desnudos.
En esta sección destacan las obras de Federico de Madrazo, Eduardo Rosales, Mariano Fortuny, Aureliano de Beruete y Joaquín Sorolla, cuyas obras realistas representando la vida de los pescadores y los granjeros además del estudio de los efectos de la luz del sol y las sombras empujaron al arte español al umbral de la modernidad.