El Ràfol d’Almúnia, el pueblo donde los políticos cobran cero euros

El tema de los sueldos de los políticos es, en muchas ocasiones, una cuestión un tanto polémica e impopular. En la comarca valenciana de la Marina Alta, por poner un caso, este nuevo mandato ya ha dado que hablar en municipios como por ejemplo en Llíber, un pueblo de apenas 1.000 habitantes donde el equipo de gobierno del PP se repartirá en salarios 85.000 euros al año, de los que 39.000 serán para el alcalde por una dedicación parcial.

Pero en el Ràfol d’Almúnia, una localidad de 644 habitantes de la misma comarca, no es que cobren poco, como en Benimeli, donde han establecido una retribución de 12 euros la hora y un máximo de 4.500 euros al año. Es que directamente no cobran nada. Cero euros. Así lo decidió la Corporación en un pleno celebrado el pasado 3 de julio.

Los cuatro concejales de Compromís, que ha ganado las dos últimas elecciones después de lustros de ayuntamientos del PP, renuncian a cualquier tipo de retribución y sus cargos no tendrán dedicación exclusiva ni parcial. Tampoco cobrarán por asistencias a plenos ni comisiones. Todo eso a pesar de que, según el decreto publicado el año pasado por el Gobierno que regula las percepciones de las corporaciones locales, en un pueblo con una población inferior a mil habitantes como el Ràfol d’Almúnia el alcalde, Josep Vicent Rovira, podría haber cobrado hasta 31.839 euros al año.

Su única percepción será por dietas: “Para los gastos efectivos ocasionados en el ejercicio de su cargo (dietas de alojamiento, manutención y gastos de transporte, asistencias a cursos y congresos, y por participación en tribunales de oposiciones y concursos), según las normas y cuantías de aplicación general en las Administraciones Públicas”. Es decir, que por lo menos esos posibles gastos extraordinarios no les costarán dinero de su bolsillo.