Lidia Montero: “Es tiempo de recuperar los círculos, la seña de identidad de Podemos”

Lidia Montero es enfermera en el Hospital de San Juan de Alicante, miembro de la ejecutiva autonómica de Podem como secretaria de organización e integrante de la gestora que dirige el partido desde la dimisión del secretario general Antonio Estañ. Perteneciente a la antigua corriente anticapitalista, que abandonó el partido, esta semana ha anunciado su candidatura a la secretaría general, liderando un espacio que reivindica los círculos bajo el nombre 'Arrels de Podem'.

¿Por qué se decidió a dar el paso y presentarse a la secretaría general?

He pensado y pienso que es necesario garantizar un espacio de protagonismo para la gente que está en los círculos, en los movimientos sociales, a los concejales y concejalas. Es necesario reforzar una conexión entre las bases y la dirección para trabajar conjuntamente en la política que llevamos a cabo en las instituciones, recuperar la horizontalidad en la toma de decisiones desde el respeto a la diversidad de opiniones.

¿Ha hablado con sus compañeras que también se presentan?

Hablamos a diario porque somos compañeras y llevamos meses trabajando intensamente en el partido. Hemos empezado a hablar, nos hemos felicitado las tres, estamos muy contentas de que hayamos dado el paso tres mujeres, que podamos feminizar más Podem, no solo con la presencia de mujeres, sino con planteamientos respetuosos, conciliadores, menos competitivos.

Pertenecía en el anterior proceso a la corriente anticapitalista, que acabó integrándose en la de Antonio Estañ. ¿En este proceso, se siente cómoda en alguno de los espacios?

No solo es que me sienta cómoda yo. Las tres que por ahora hemos presentado candidatura representamos a espacios formados por gente diversa. Es un proceso de debate en el que tendremos que hablar las candidaturas. Hay que hablar de qué proyectos presentamos para llegar a una unidad, primero tenemos que conocer qué proyectos planteamos, obviamente pertenecemos al mismo partido y tenemos objetivos comunes. Para eso está el debate.

Usted que ha estado en el partido, en la gestora, pero no en las instituciones. ¿Cómo califica el trabajo parlamentario de Podem esta legislatura?

Es positivo que estas candidaturas representemos a espacios del partido diferentes. Queda por mejorar esa coordinación entre partido, institución y bases. En Podem nuestras diputadas y diputados saben que parte del trabajo parte de lo que se ve en los círculos. Necesitamos que esa conexión sea más directa, más engranada, que permita llevar el trabajo diario y con las diferencias que pueda tener el impulso de las instituciones y desde el partido, contando con toda la gente que lo compone.

Hablan de distanciamiento con las bases. ¿Cómo se ha producido?

Los últimos años han sido complejos. Como partido hemos sobrellevado muchas elecciones, internas e institucionales. Creo que nos ha alejado del compromiso previo de construir partido. Nos falta mejorar esa relación, cuidar a nuestra gente en el territorio. El nivel municipal requiere de proyectos concretos, que permitan desarrollar el trabajo en los ayuntamientos, que tiene diferencias con las Corts. Reforzar la comunicación de los círculos más allá de los procesos burocráticos. Necesitan tener la seguridad política de que sus propuestas sean llevadas a cabo.

¿Cree que los procesos internos han hecho daño a Podem?

No lo pienso así. Tanto Podemos como Podem nacen con el espíritu de la participación, la democracia y la horizontalidad en la toma de decisiones. Eso conlleva mecanismos como las primarias abiertas, en las que todo el mundo puede presentarse; es un valor democrático muy importante. Y hemos marcado agenda en otros partidos. Eso conlleva aprender y acostumbrarnos a la diversidad de ideas y a trabajar juntos a partir de ellas, desde el consenso y el respeto. Hay dificultades en este proceso como las hay en otros. Considero que es enriquecedor, nos hace crecer y tener la experiencia necesaria para que esto se replique en la sociedad. La gente debe poder elegir cómo quiere su barrio, ciudad o país.

Preguntaba no por el hecho de tener primarias, sino por cómo se han llevado a cabo esos debates.

Han sido debates competitivos, nos ha faltado en algunos momentos respetar las diferencias y emplear espacios más conciliadores y menos agresivos. Pero considero que estamos mejorando en ese aspecto. Hemos pasado tiempos complicados, no es algo intuitivo para todo el mundo. No todo el mundo concibe la diversidad de la misma manera y, como en todo grupo de personas, surgen conflicto.

En el comunicado que anunciaba la candidatura hablaba de que la política exprés había producido un distanciamiento. ¿A qué se refieren con política exprés?

Los ritmos de la institución no encajan con los ritmos de la vida real. Aparte de burocracias, pasillos... la vida institucional hace que te sientas impulsado a que tengas que responder muy rápido a cuestiones que necesitan debate y reflexión. Uno de los mayores retos que tiene Podem es ser capaz de modificar la institución, no adaptarnos nosotros; que la institución se adapte a la democracia participativa. En ese proceso de intentar este cambio, a veces, sobre todo las personas que están en las instituciones, te empuja a tener unas prisas y unos mecanismos de respuesta que debemos tener en cuenta para que no nos absorban.

¿Cuál es su proyecto para Podem?

Dar el protagonismo a la militancia. Consiste en que podamos tener un funcionamiento que entienda que somos muchas mas personas que las caras visibles, que componemos a través de una inteligencia colectiva muy valiosa, que contamos con círculos, concejales y concejalas, con los movimientos sociales que pelean las reivindicaciones. El objetivo del proyecto es que podamos recuperar el Podem horizontal y asambleario que se enriquece con la inteligencia colectiva. Que tengamos mecanismos de comunicación y trabajo conjunto y bien coordinado.

¿Por qué han perdido tanto protagonismo por círculos?

Ha habido momentos de Podemos, que no tiene tantos años, en los que la apuesta clara era el protagonismo de los círculos y otros momentos, por esta política exprés, que nos enfocaba a centrar el trabajo en conseguir los espacios en la institución. Estos movimientos han hecho que los círculos dejaran de ser el trabajo de Podem. Si hubiéramos dedicado tiempo solo a construir el partido no lo habrían perdido. Es tiempo de recuperarlo. Son la seña de identidad de Podemos. Los cambios políticos se realizan más en la calle que en la institución. Necesitamos círculos arraigados en el territorio.

¿Hablando del modelo orgánico, es partidaria de la bicefalia, el liderazgo coral, que la secretaria general sea la portavoz autonómica?

No solo es bicefalia. Entra la diversidad y el reparto de tareas. En Podem ya hemos practicado esta coralidad y es útil porque enriquece. Cada persona representa unos valores y unos proyectos que nos enriquecen al trabajarlas en conjunto. Que diversas personas puedan estar en diversos espacios compartiendo responsabilidades muestra lo que queremos en la sociedad.

Hasta que Estañ dimitió y se convocó la gestora, el modelo de partido parecía ser el de que el secretario general fuera el portavoz parlamentario y a la vez tener varios portavoces corales en el partido. Con la gestora este liderazgo compartido se ha diluido. ¿Pero es partidaria de este modelo?

Pasamos un tiempo de impasse temporal con la gestora. Sigo siendo partidaria de esas portavocías; no se ha podido reforzar todo pero sigo apostando por ello.

¿Cómo valora que por primera vez una mujer sea el principal rostro del partido?

Es la mayor alegría para este proceso. Sin pensarlo ha ocurrido así, lo cual es maravilloso. En anteriores primarias se venía reclamando la importancia de poner en la práctica aquello que defendemos. La feminizacion de la política del partido y la despatriarcalización de la sociedad, poner en el eje los cuidados y los valores feministas, con estas primarias que nos aseguran tener una mujer, lo debemos celebrar.