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Multas de más de 6.000 euros por empleado a dos empresas por las horas extra de trabajadores en ERTE

Imagen de archivo de maquinaria para contenedores de Noatum, en Málaga.

Laura Olías

29 de marzo de 2021 18:33 h

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La Inspección de Trabajo sigue sancionando el fraude en los ERTE por la COVID. Dos empresas del grupo Noatum, multinacional de servicios marítimos y portuarios, han sido multadas con 6.251 euros por cada trabajador al que emplearon más horas de las estipuladas en los ERTE de reducción de jornada en los que estaban inmersos, tras la denuncia presentada por CCOO. En total, las sanciones ascienden a unos 37.500 euros para una compañía y otros 43.700 para otra. Además, se exige a las empresas que devuelvan las prestaciones por desempleo recibidas por los trabajadores.

CCOO ha informado este lunes de las dos actas de infracción, contra las empresas Noatum Holdings y Noatum Maritime, por ordenar horas de trabajo por encima de las acordadas en los ERTE de reducción de jornada que utilizaron ambas compañías debido a la pandemia. La Inspección de Trabajo constató esta infracción en el caso de “13 trabajadores, aunque había más”, afirma Cristina López Gómez, coordinadora del sector del Mar de FSC-CCOO Catalunya. Seis están empleados en Noatum Holdings y los siete restantes, en Noatum Maritime.

Fuentes de Noatum responden a elDiario.es que la multinacional negoció un ERTE parcial con la representación sindical de las empresas del grupo en España, “cuya duración fue del 15 de abril al 15 de julio de 2020” y que “se detectó que efectivamente un 1% de la plantilla afectada por el ERTE había realizado una jornada laboral superior a la acordada”, pero destacan que la “instrucción clara y precisa de la empresa fue no realizar más horas de las previstas”.

La multinacional acatará las sanciones de la Inspección, sin presentar recurso, indican las mismas fuentes. “Grupo Noatum llegó a un acuerdo de compensación con estas personas y las representaciones legales de los trabajadores, así como la asunción de esta situación a todos los efectos”, sostienen.

Aviso antes de la denuncia

La versión de CCOO es diferente. Desde el sindicato explican que denunciaron a las empresas ante la autoridad laboral después de que la representación de los trabajadores advirtiera a Noatum de que no se podían realizar más horas de las comunicadas al SEPE. “Que es algo que ya todo el mundo sabía”, destaca Cristina López Gómez. Tras el aviso, la compañía mandó un comunicado oficial en el que sostenía que la plantilla debía cumplir el horario establecido en el ERTE, pero la Inspección constató que en la práctica este abuso se siguió produciendo, con jornadas más largas de varios empleados incluidos en los expedientes.

Por lo tanto, los inspectores levantaron actas de infracción a ambas compañías por dar ocupación a estos 13 trabajadores en momentos en los que estaban afectados por ERTE. Las empresas no comunicaron al SEPE cambios en las jornadas reducidas de los empleados, ni los desafectaron de los expedientes, como se pedía desde la representación de la plantilla.

“Se decidió denunciar desde CCOO, porque se avisó a las empresas de que esto no se podía hacer y se hizo caso omiso”, sostiene Cristina López Gómez, que recuerda que desde el sindicato se pretende que los ERTE solo se utilicen mientras sea necesario, que las empresas no se refugien en ellos para reducir sus costes laborales. El Estado sufraga en los ERTE por el coronavirus casi la totalidad de las cotizaciones sociales que deberían pagar las empresas y los trabajadores están protegidos con la prestación de desempleo, que supone el 70% de su base reguladora.

La sanción impuesta es de 6.251 euros por cada trabajador, la cuantía mínima posible para este tipo de infracción, considerada muy grave en la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social, LISOS. El Gobierno legisló durante la pandemia para sancionar este tipo de abusos en los ERTE, al sancionar la práctica de “efectuar declaraciones, o facilitar, comunicar o consignar datos falsos o inexactos que den lugar a que las personas trabajadoras obtengan o disfruten indebidamente prestaciones”.

En casos muy graves como este, la empresa incurre en una infracción “por cada una de las personas trabajadoras que hayan solicitado, obtenido o disfruten fraudulentamente de las prestaciones de Seguridad Social”, recoge la LISOS.

Devolver también las prestaciones por desempleo

Como reguló el Gobierno, la Inspección de Trabajo exige a las compañías del grupo Noatum las cantidades indebidamente percibidas por los trabajadores en protección por desempleo, dado que no aprecia dolo de los empleados alcanzados por este abuso.

La representante de CCOO subraya que en casos como este, de crisis e incertidumbre, los trabajadores suelen tener miedo a no llegar al trabajo que les piden las empresas o no finalizar sus tareas.

“Las empresas tendrán que devolver las prestaciones por desempleo de cada trabajador o trabajadora al SEPE y, lo más importante, están obligadas al pago de los salarios completos a estos trabajadores y trabajadoras desde el primer día que realizaron horas, es decir, los desafecta del ERTE inicial”, subraya CCOO en su comunicado.

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