Contenedores volcados, cajeros quemados y pintadas: los efectos de la huelga general en Euskadi

Ni las capitales ni los pueblos han registrado incidentes de gravedad, aunque la Ertzaintza ha detenido a cinco personas y ha identificado a otras seis. Los incidentes más destacados han sido cortes puntuales en carreteras y vías férreas. Eusko Trenbide Sarea (los ferrocarriles vascos) ha sufrido sabotajes por valor de 35.000 euros. Los daños más destacados se han registrado en la línea de Euskotren entre Berriz y Zumaia, donde han caído tres postes de la catenaria, con lo que la línea ha quedado cortada. Además, ha habido piquetes en la estación de Hendaia, que han impedido la salida de todos los servicios hasta las nueve y media de la mañana.

En Arrasate, Gipuzkoa, desconocidos han quemado el cajero de un banco, un acto que el gobierno municipal (PNV) ha condenado de 'kale borroka' ha realizado un llamamiento a “dejar atrás los moldes del pasado y apostar por la convivencia”.

Las capitales han estado lejos de sufrir un colapso, a pesar de que se han producido algunos cortes de carreteras y varios piquetes han intentado bloquear la apertura de comercios e incluso de algunos polígonos industriales. Así, alrededor de las ocho de la mañana un centenar de manifestantes han cortado durante aproximadamente un cuarto de hora los accesos a Bilbao por San Mamés con una sentada. El servicio del tranvía en la capital vizcaína también ha estado interrumpido entre el Palacio Euskalduna y La Casilla por presencia de gente en las vías.

Mientras, en el barrio bilbaíno de Deusto, cerca de las 9 de la mañana, un grupo de encapuchados han tirado al suelo varios contenedores mientras que, por otra parte, desconocidos han realizado pintadas en autobuses de Bilbobus de apoyo a la huelga convocada este jueves.