Ferraz sitúa al frente de la gestora del PSOE extremeño al delegado del Gobierno, José Luis Quintana

El delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, será el encargado de presidir la comisión gestora que coordinará la actividad del PSOE en la región tras la dimisión de Miguel Ángel Gallardo por los malos resultados en las elecciones del domingo pasado. Así lo ha anunciado la Secretaría de Organización en un comunicado difundido esta Nochebuena.

Junto a Quintana, en la gestora, figuran como vocales María José Pulido, Gonzalo Romero, Carmen Yáñez, Pablo Iglesias Ordóñez, Ana María Fernández, José María Ramírez Morán e Irene Pozas García. “A partir de este momento, la Comisión Gestora se encargará de garantizar el funcionamiento organizativo y convocar y supervisar los procesos democráticos internos hasta que se elija la nueva Ejecutiva Regional”, señala la nota.

Muy próximo a Pedro Sánchez, José Luis Quintana Álvarez es natural de Don Benito, ciudad de la que fue alcalde desde 2015 hasta 2023. Nacido en 1950, cursó Formación Profesional de Segundo Grado en Administración de Empresas y realizó un Máster en Dirección Económico y Financiera. Fue director general de Financiación y Medios Agrarios de la Junta de Extremadura, director general de Política Agraria Comunitaria y posteriormente consejero de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura entre los año 2003-2007 y consejero de Formento entre los años 2007-2011. Además ha sido diputado del Área de Fomento de la Diputación de Badajoz entre los años 2011-2015. Está casado y tiene dos hijos.

Un partido descabezado

El PSOE extremeño quedó descabezado el pasado lunes, al día siguiente de que el partido, liderado por Miguel Ángel Gallardo, cosechara el peor resultado de su historia en unas elecciones autonómicas. Gallardo presentó su dimisión pero anunció que recogería su acta de diputado. La noche electoral se saldó con la pérdida de 108.000 votos y el retroceso a un suelo histórico de 18 escaños, una sentencia política a un líder que llegaba a la campaña lastrado por su procesamiento por la contratación del hermano de Pedro Sánchez en la Diputación de Badajoz.

Gallardo había admitido el domingo que el resultado fue “malo sin paliativos”, pero retrasó su dimisión, que todos daban por hecha, a la reunión de la Ejecutiva del partido el lunes pasado.