Una empresa de la familia del director de Investigación recibió contratos millonarios de la Junta
Germán Puebla Ovando, actual director gerente de Cicytex, la empresa pública que gestiona los cuatro centros de investigación de la Junta, abandonó su cargo como consejero delegado de la empresa familiar Puebla Estellez SA el 24 de enero de 2012 para ocupar un alto cargo en el primer Gobierno de José Antonio Monago. Durante seis meses, Puebla Ovando compatibilizó su cargo como director de Iprocor con el de consejero delegado de esa empresa familiar, en el que junto a sus hermanos tenía la mitad de las acciones.
La empresa, radicada en Badajoz, tiene intereses en sectores muy variados, como recoge en su objeto social: asesorar a empresas, turismo de naturaleza, producción y comercialización de plantas… Desde su creación ha ido ampliando el campo de actividades hasta dedicarse en la actualidad a una diversidad llamativa.
Puebla Ovando se mantuvo como director de Iprocor (Instituto de Promoción del Corcho) durante casi dos años y en setiembre de 2013 ascendió políticamente para ocupar la dirección de una nueva empresa pública de la Junta resultante de fusionar los diversos centros de investigación en materia agroalimentaria: Cicytex.
Contratos variados
Al dejar su cargo en la empresa, a Germán Puebla Ovando le sustituyó como consejero delegado su hermano José Joaquín Puebla Obando. En ese mismo consejo de administración renovado en varias ocasiones en estos dos años figuran también otro hermano, José Luis.
La salida de Germán Puebla Ovando como consejero delegado de Puebla Estellez SA no parece que haya tenido malos resultados económicos en las cuentas de la sociedad ya que en estos tres años en el que él ha sido alto cargo de la administración regional ha recibido importantes contratos de la Junta de Extremadura, sobre todo de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente.
Así, en noviembre de 2013 recibió un contrato por importe de de 212.082 euros para llevar a cabo mejoras forestales en montes incluidos en la Red Natura 2000, de la sección forestal Cáceres occidental“. No hubo una convocatoria abierta para este contrato; solo un procedimiento negociado.
Otro contrato de notable cuantía (366.649 euros) se adjudicó en agosto de 2013 y tenía como objetivo realizar tratamientos silvícolas para mejorar la lucha contra incendios en el sur de Badajoz. También la adjudicación en este caso corre a cargo de la consejería de Agricultura. En el anuncio de esa convocatoria hubo un error, ya que primero se convocó un concurso en el que no se pedía clasificación de la empresa que se presentase y luego se publicó en el DOE una rectificación pidiendo expresamente una clasificación muy específica para participar en un concurso que finalmente logró la empresa familiar de Puebla Ovando.
Procedimientos negociados
Según la información a la que ha tenido acceso eldiarioex, la última adjudicación de la Junta que ha recaído a favor de esa empresa familiar es la vigilancia del Parque Nacional de Monfrague.
Fuentes del sector forestal de la región no ocultan su extrañeza ante esas adjudicaciones a una empresa de alto cargo del Gobierno regional. Y sorprenden aún más las adjudicaciones realizadas por el procedimiento de negociado, esto es, sin concurso abierto.
El sector forestal regional atraviesa una difícil situación motivada por las reiteradas adjudicaciones a la empresa pública Tragsa que han mermado la capacidad del sector regional. Según ha publicado eldiarioex, el sector forestal extremeño estudia poner las adjudicación es forestales de la Junta en vía judicial por el perjuicio económico que la administración regional estaría sufriendo por las adjudicaciones directas a Tragsa. Sostiene la asociación regional forestal Aeefor que en caso de haber sacado a concurso abierto esas obras forestales, la administración regional podría haber ahorrado en torno a un 30% del gasto, una cifra que podría rondar los 53 millones de euros.
Entre tanto, los investigadores de Cicytex continúan muy molestos con las reiteradas obstrucciones que encuentran en su trabajo científico y acusan directamente al director Puebla Ovando de esas injerencias. Algunos investigadores se están planteando incluso denunciar a Puebla ovando por acoso laboral.