El alcalde de Vigo recurre la sentencia que le obliga a derribar una cruz franquista
La Asociación pola Memoria Histórica do 36 exige al Ayuntamiento el derribo de la Cruz del Castro en Vigo, el monumento de exaltación fascista que debe ser suprimido según el juzgado contencioso-administrativo número 2 de la ciudad, que hace unos días dio la razón a este colectivo y condenó al gobierno local a proceder “de manera inmediata” a retirarla por ser “una humillación para los vencidos”. Pero no opina lo mismo el alcalde, Abel Caballero, que acaba de anunciar que la administración local ha recurrido la sentencia y, por lo tanto, intentará evitar la retirada de este símbolo de la dictadura franquista.
La sentencia hecha pública la pasada semana supuso el éxito de la movilización y la lucha social que numerosos colectivos lideraron por la retirada de este símbolo franquista inaugurado en 1961 por las autoridades de la dictadura para homenajear a los “caídos”, los sublevados fascistas que lucharon contra la legalidad republicana. Pero el dictamen no es firme y el Ayuntamiento de Vigo tiene un plazo de quince días para recurrir ante el TSXG. Y el alcalde socialista Abel Caballero ya anunció la presentación de un recurso al dictamen judicial. Sus argumentos son que el Ayuntamiento siempre recurre y que el monumento ya no es un símbolo franquista sino religioso.
“Haremos igual que con todos los procedimientos judiciales y este no es una excepción”, aseguró ante los medios.
Porque aunque el gobierno local, y en aprobación de la Ley de memoria histórica de 2007, eliminó varios escudos o emblemas franquistas en la ciudad, la Cruz del Castro continuó en pie. Fue precisamente una resolución de la junta de gobierno local de marzo de 2013 la que dio inicio a este proceso judicial que ahora culmina. En aquel entonces se rechazó la retirada de la cruz al considerarse también que desde que se habían retirado las alusiones a la dictadura en el monumento, este ya no era un símbolo franquista, sino únicamente religioso. Pero hubo más. Hace ahora un año, el pleno también dijo no a una propuesta del BNG que en una moción instó a su derribo. El PSOE se había abstenido y el PP había votado en contra.
Este mismo lunes, la Asociación pola Memoria Histórica do 36 ha celebrado una sentencia que restituye, “cerca de 80 años después”, la memoria de los que defendieron la legalidad de la República frente al golpe de estado franquista. Manuel Reinoso, uno de los portavoces, señaló directamente al alcalde como culpable de que “este monumento fascista, el símbolo más visible de la dictadura en la ciudad” no haya sido derribado aún y recordó que Caballero “los ignoró” como si fueran “escoria”.
“Con su prepotencia antidemocrática, no hizo caso ninguno de nuestras peticiones” ni de las mociones presentadas en el pleno, por lo que no tuvieron más alternativa que acudir a la justicia. “Recurrir es la peor de las opciones”, aseguraron desde el colectivo.
Además, la portavoz municipal del BNG, Iolanda Veloso, destacó este lunes que el Bloque “no entendería que el gobierno local recurriera la sentencia”. “Reclamamos que la derribe lo antes posible porque es una cuestión de justicia en todos los sentidos”, destacó, recordando que la Cruz del Castro simboliza la victoria de uno de los bandos, en concreto el bando nacional.
“Cuando el BNG tuvo responsabilidades de gobierno, fue coherente y eliminó la simbología franquista de la Casa das Artes”, destacó la portavoz nacionalista en relación a la retirada del escudo y las inscripciones franquistas del frontispicio de este edificio, a finales de 2010, siendo teniente de alcalde el naiconalista Santi Domínguez.
“Parece que el alcalde prefiere la ley de la amnesia histórica”, comentó Veloso, que cree que “además de existir una reclamación política y ciudadana, hay también una reclamación judicial”, por lo que reclama “una demolición inmediata y que el gobierno no recurra la sentencia”.
Por otra parte, el coordinador local de IU, Rubén Pérez, discutía la excusa del coste del derribo y apostaba por cumplir la sentencia. “El coste de retirar la Cruz del Castro puede ser cero euros. Que pidan voluntarios, que vamos a ser un buen puñado los que aparezcamos con el pico y la marra”, dijo en un mensaje en las redes sociales.
