Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La Unión Europea se sienta a pensar qué quiere ser tras la pandemia: “No podemos volver al statu quo, no podemos volver al mundo del pasado”

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, junto jóvenes europeos en la ceremonia de lanzamiento de la Conferencia sobre el Futuro de Europea, el 9 de mayo de 2021 en Estrasburgo.

Andrés Gil

Corresponsal en Bruselas —
9 de mayo de 2021 19:48 h

8

El 9 de mayo tiene un significado especial en Europa. Robert Schuman, ministro francés de Exteriores, pronunció el 9 de mayo de 1950 una declaración que alumbró la Comunidad Europea del Carbón y el Acero. “Europa no se hará de una vez ni en una obra de conjunto: se hará gracias a realizaciones concretas, que creen en primer lugar una solidaridad de hecho”, dijo Schuman aquel día.

Hacía cinco años que había acabado la Segunda Guerra Mundial –de hecho, el 9 de mayo de 1945 fue declarado por la URSS Día de la Victoria–, y se trataba de evitar una tercera a través de una alianza de paz entre Francia y Alemania. El 9 de mayo fue declarado Día de Europa en 1985, y desde entonces la UE intenta dorarlo de contenido.

Schuman (conservador) fue ministro de Asuntos Exteriores francés entre 1948 y 1952, y está considerado uno de los fundadores de la unidad europea. En cooperación con Jean Monnet, elaboró el célebre Plan Schuman, anunciado el 9 de mayo de 1950: propuso el control conjunto de la producción de carbón y acero, las materias primas más importantes de la industria de armamentos. La idea de partida era que, sin el pleno control sobre la producción de carbón y acero, no es posible librar una guerra.

Hoy en día no se vislumbra una guerra dentro de Europa. Pero las heridas que está dejando la COVID-19 a menudo se comparan con una guerra. Y, por eso, la Conferencia sobre el Futuro de Europa que propuso inicialmente Emmanuel Macron para repensar la UE durante dos años y elaborar unas conclusiones que coincidieran con la presidencia francesa de la UE y las elecciones en aquel país –mitad de 2022–, ha encontrado un nuevo sentido con la pandemia.

Para empezar, ha arrancado un año tarde. Y, para continuar, ha encontrado una razón de ser más allá del funcionamiento de la UE: pensar cómo debe ser el mundo tras la pandemia.

Este domingo 9 de mayo se ha celebrado en la sede de Estrasburgo del Parlamento Europeo el acto inaugural del proceso participativo, cuyo elemento básico es una web en la que cualquier persona puede someter cuestiones a debate: la plataforma digital sobre el futuro de Europa.

La Conferencia sobre el Futuro de Europa (CoFoE) es una iniciativa de la Unión Europea para reformar sus políticas e instituciones tras consultas a gran escala en todo el continente entre mayo de 2021 y la primavera de 2022. Los objetivos, principios, gobernanza y metodología de la Conferencia se establecen en una Declaración conjunta firmada conjuntamente por los Presidentes del Parlamento Europeo, la Comisión Europea y el Consejo el 10 de marzo de 2021.

“No podemos volver al statu quo, no podemos volver al mundo del pasado, necesitamos nuevos modelos que tengan en cuenta la dimensión social y medioambiental, un nuevo enfoque centrado en la dignidad del individuo pero también en la protección del planeta”, ha dicho el presidente de la Eurocámara, David Sassoli, en su discurso: “Creo que es nuestra responsabilidad poner a los ciudadanos en el centro de su proyecto europeo, y cuanto más avancemos en la integración, en esta solidaridad entre Estados, más importante será que los ciudadanos europeos estén y se sientan comprometidos con este proyecto”.

Y ha añadido: “Nuestras democracias también han sido desafiadas en todo el mundo. Todavía recordamos el asalto al Capitolio en Washington, que fue una llamada de atención para todo el mundo, no solo para Estados Unidos. Nuestros valores democráticos se ven cada vez más atacados por el autoritarismo, por aquellos que quieren hacernos creer que nuestras libertades no nos protegen de los desafíos a los que nos enfrentamos, que la democracia es ineficaz e inútil. Pero para que la democracia funcione, hay que defenderla, reforzarla, desarrollarla y legitimarla aún más. ¿Cómo se puede hacer? Protegiendo el bien común, reforzando así el papel de los parlamentos como garantes de la expresión democrática de los pueblos, pero también garantizando la participación y la implicación de los ciudadanos en la vida democrática. Creo que es urgente renovar nuestro pacto democrático y social renovando el vínculo con nuestros ciudadanos. Por eso el Parlamento Europeo se toma muy en serio esta conferencia”.

De la Conferencia sobre el Futuro de Europa no está previsto que salga necesariamente una actualización de los tratados de la UE, pero Sassoli ha pedido ambición en este sentido: “Y si todas estas reflexiones y las de nuestros ciudadanos implican una actualización de los Tratados, somos valientes, no debemos tenerles miedo, y en este proceso seguimos discutiendo con nuestros ciudadanos, nuestros electores, los diputados nacionales y regionales, la opinión pública . Hoy no podemos permitirnos tener tabúes, debemos afrontar este ejercicio con libertad y confianza a través del debate democrático”.

Trauma

“La pandemia ha sido traumática para las personas en Europa y en todo el mundo”, ha afirmado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen: “Será una parte formativa de tantas vidas y de tantos sectores de la sociedad. Y como todo trauma, tenemos que encontrar una manera de hablar de él si queremos ir más allá. Y no hay mejor manera de hacerlo que ofreciendo perspectiva, esperanza y la capacidad de cambiar las cosas para mejor. Por primera vez en una generación, a más personas les preocupa que sus hijos no estén mejor que ellos. Esto demuestra que necesitamos una nueva forma de solidaridad y justicia social entre generaciones”.

“Es una cuestión de equidad y derechos”, ha sostenido la jefa del Ejecutivo comunitario, “no solo dentro de la sociedad actual sino a lo largo de generaciones. No podemos reemplazar el tiempo perdido que la pandemia les ha quitado a los jóvenes, pero podemos construir algo mejor y más justo, para ellos y con ellos. Tenemos que actuar ahora y los jóvenes deben desempeñar un papel central en este cambio. La tarea es enorme. Las cosas tienen que cambiar fundamentalmente para que la próxima generación también pueda seguir rodeada de naturaleza. Debemos cambiar para que nuestros nietos también conozcan la primavera, el verano, el otoño y el invierno”.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anfitrión del acto en Estrasburgo, ha empujado a la UE a actuar con mayor rapidez para hacer frente a las crisis y abordar cuestiones esenciales como la investigación y las inversiones. “A veces vemos que Europa no va lo suficientemente rápida y quizá no tiene suficiente ambición”, ha dicho Macron: “Nuestra democracia europea es una democracia de compromiso y de equilibrio, lo que es una virtud que debemos proteger como un tesoro, pero también es una debilidad cuando choca con sus propios procedimientos y no hay ninguna fatalidad en ello. Ddebemos recuperar la eficacia y la ambición”.

“La soberanía es también la capacidad de producir hoy y mañana”, insistió Macron, quien añadió que no es suficiente con que Europa sea un mercado abierto, sino que también necesita convertirse “en una gran comunidad de grandes investigadores, creadores, artistas, industriales. Producir, crear en nuestro territorio es garantizar nuestra soberanía, la protección de nuestro modelo”. Y sentenció: “Nuestra Unión necesita una nueva respiración democrática”.

Etiquetas
stats