Convocada una manifestación en Vallecas contra la presencia de las empresas de 'desokupación' en el barrio

El próximo viernes 24 de octubre a las 19.30 horas una manifestación convocada por movimientos sociales transcurrirá por Puente de Vallecas bajo el doble lema “Vallekas (sic) por la vivienda digna. Fuera mafias de desokupación de nuestros barrios”. La marcha saldrá del Club Deportivo La Fábrika (calle Alfonso XIII, 17) y llegará al estadio del Rayo Vallecano.

El detonante de la reacción vecinal son los sucesos del pasado 14 de octubre, cuando miembros de la empresa de desokupación APD Security Iberia acudieron a desalojar sin orden judicial una vivienda de la barriada y, a continuación, se dirigieron al gimnasio popular y escuela de boxeo La Fábrika, situado en la calle Alfonso XIII.

Después de que una decena de hombres pertrechados de camisetas negras con el logotipo de la empresa de seguridad llegaran al gimnasio y aporrearan la puerta al grito de “rojos, maricones” (tal y como se aprecia en un vídeo grabado por un vecino), se armó una pelea con miembros del gimnasio y vecinos.

La intervención policial se saldó con la detención de nueve miembros de APD y también de otros siete vecinos. Poco después de los hechos, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) emitía un comunicado pidiendo que no se normalice “que las llamadas empresas de desokupación, con sus grupos paramilitares, irrumpan en nuestros barrios para expulsar de sus hogares, usando métodos muchas veces constitutivos de delito, a vecinos y vecinas que por diferentes circunstancias no pueden afrontar los gastos de vivienda”. La FRAVM trasladaba las declaraciones de miembros de la Asociación Vecinal de Doña Carlota-Nueva Numancia, una de sus vecinales federadas.

El Club Deportivo La Fábrika, que lleva quince años abierto en Puente de Vallecas, ha emitido un comunicado con su versión de los hechos abundando en que lo del día 14 de octubre no fueron hechos aislados. “Queremos denunciar que hemos sufrido distintas agresiones por parte de esta empresa desde el primer día que pusieron un pie en el barrio”, dicen.

Desde el club denuncian que los miembros de la empresa de desokupación ya pasaron por su domicilio social el 26 de septiembre, día que también habían acudido a amedrentar a la persona a la que volverían a intentar echar el día 14 de octubre en la calle Leonor González.

“Pasaron antes por nuestro gimnasio e intimidaron a uno de los alumnos que estaba en la puerta esperando a que se abriera para asistir a clase. En el momento en que lo ocurrido se pone en conocimiento de uno de los responsables del espacio, este se dirige a pedir explicaciones, momento captado por las cámaras de tv de cierto programa amarillista criminalizándole y manipulando el contexto de la situación, haciendo parecer que es el agresor y los agresores son las víctimas”, denuncian, añadiendo al relato el caso de otra vecina, perseguida por los desokupadores hasta el portal de su casa, según el comnicado.

El día 14, según explican, fueron advertidos en torno a las 17.30 de que los desokupadores de la empresa APD Security Iberia, que habían ido a tratar de echar al mismo vecino, se dirigían hacia el gimnasio “armados con palos, piedras y porras extensibles”. En este momento iban a comenzar las clases de boxeo para niños.

Se produjo una “batalla campal” que desde La Fábrika tildan como un acto de defensa. “Como resultado de todo esto, fuimos detenidas dos personas del gimnasio que estábamos dentro en el momento del ataque e intento de asalto al local, y cinco vecinos de los que vinieron a apoyarnos. Los agresores, aun estando localizados e identificados, no todos fueron detenidos”, explican. La empresa APD Security Iberia se presenta en su web como “especialistas en desalojos okupas” y dicen haber realizado más de 3000 “desocupaciones”.

La reclamación por una vivienda digna es habitual entre las reivindicaciones de las organizaciones sociales de Vallecas (fue el leiv motiv de la Batalla naval de este año). Unida a esta, aparece ahora el rechazo frontal a las llamadas empresas de desokupación, que utilizan controles de acceso a las viviendas y otras técnicas intimidatorias para echar a personas que viven usurpando o, incluso, no han pagado todas las mensualidades de su alquiler.