Primero fue Albert Rivera en el programa de televisión Espejo Público: “Cambio va a haber en la Región de Murcia porque el PP no va a gobernar solo”. Una semana después el flamante presidente de la Mesa de la Asamblea Regional, Alberto Castillo, diputado de Ciudadanos, ha pronunciado unas palabras parecidas el martes 11 de junio al tomar posesión del puesto: “La Región de Murcia necesita un cambio importante”. No sé de qué cambio hablan exactamente puesto que hasta el momento el PP ha estado gobernando en la Región con el apoyo de Cs, a quienes necesitaban para contar con mayoría absoluta.
El cambio real que se ha producido para esta X Legislatura no es el que Cs se empeña en vender, es el acuerdo entre PP, Cs y Vox para repartirse la cuota de poder. El diputado de Vox Francisco José Carrera de la Fuente se ha hecho con la Secretaría Primera de la Asamblea, lo cual augura la composición de un Gobierno en el que el partido de extrema derecha posiblemente contará con alguna consejería, amén de las que se repartan Cs, que ahora sí quieren sillones.
¿Es un partido como Vox que aboga por la supresión de la propia Asamblea o de la actual Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que tacha la reforma del estatuto regional acordada por unanimidad de “marxista”, que tilda la lucha por la igualdad como ideología de género o cuyo líder nacional teme que los inmigrantes musulmanes “se conviertan en un problema” el cambio que necesita esta Región? Ese, desde luego, parece ser que es el `cambio´ por el que apuesta Ciudadanos en Murcia.
Ningún argumento de regeneración política después de prácticamente un cuarto de siglo bajo gobierno del PP o de lucha contra la corrupción -ahora que la superación de un plazo legal deja en el aire la investigación de la desalinizadora de Escombreras, entre tantos otros casos- ha pesado mínimamente para Cs a la hora de formar un pacto con el PP y Vox para constituir la Mesa de la Asamblea Regional y también, como veremos más adelante, para formar Gobierno en un pacto a la andaluza.
“Cómo lágrimas en la lluvia”
Por más que ostenten actualmente la presidencia de la Mesa de la Asamblea Regional y ocupen futuras consejerías en el Gobierno de la comunidad, el partido de Albert Rivera en Murcia se está condenando, de este modo, a desaparecer en el medio plazo “como lágrimas en la lluvia”, como dijo el replicante Roy Batty en el monólogo final del filme `Blade Runner´.
Entiendo que la mayor parte de los votantes de Cs en Murcia son personas de centroderecha, o hasta alguna habrá de centroizquierda, hastiados de las corruptelas del PP y de la ineficacia de su gestión que ha llevado a la Región a ocupar los últimos puestos de los ránkings de servicios sociales, fracaso educativo y pobreza del país. Me imagino también que las propuestas neorrancias de Vox tampoco serán su apuesta de cambio más urgente. De ahí la reciente movilización entre parte de la ciudadanía que ha firmado el `Pacto por la Regeneración´ en el que se auspiciaba un acuerdo de Cs con el PSOE y que, visiblemente, ha caído en saco roto.
Traicionando a muchos de sus votantes murcianos por la estrategia nacional impuesta por el partido naranja, Cs se quedará en Murcia sin casarse con nadie, para vestir santos.
0