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El pacto PNV y PSE se aplica casi sin fisuras para copar casi todo el poder municipal en Euskadi

Los concejales del Ayuntamiento de Bilbao, con Aburto en el centro con el bastón de mando

Eduardo Azumendi

PNV y PSE han reafirmado su poder municipal en Euskadi después de que el pacto suscrito entre ambos partidos días antes se haya aplicado prácticamente sin fisuras en toda la comunidad en el momento de la verdad, cuando se han constituido los ayuntamientos. Gracias ese acuerdo global cada partido ha facilitado la elección como alcalde del candidato del otro cuando éste haya sido el más votado en las elecciones municipales. Además, se han respaldado cuando alguno de los socios ha optado a la alcaldía siendo la segunda fuerza. Algo que, sobre todo, ha ocurrido en localidades donde ganó EH Bildu. Así, PNV y PSE han logrado incrementar su poder municipal básicamente a costa de EH Bildu y del PP en menor medida, al que han arrebatado la alcaldía de Laguardia.

Solo un representante del PSE se ha saltado el pacto global con el PNV para liderar los ayuntamientos vascos y ha dado alcaldía de la localidad de Samaniego a EH Bildu en detrimento de los jeltzales. El concejal Eduardo Pascual, único edil socialista en la pequeña localidad de 320 habitantes, ha otorgado la 'makila' a Pilar Garmendia. La dirección del PSE ya ha anunciado medidas disciplinarias contra este concejal, a quien ha pedido el acta, pero es un independiente. En Samaniego, ganó el PNV con 3 concejales, los mismos que EH Bildu. El PSE obtuvo uno.

En total, 42 ayuntamientos tendrán un alcalde nacionalista o socialista gracias al acuerdo de colaboración. A los que hay que sumar los consistorios en los que el 26-M alguno de los dos consiguió mayoría absoluta (81 localidades en el caso del PNV y tres en el del PSE). Y por si fuera poco, hay que añadir las alcaldías que el PNV conseguirá por medio del apoyo de EH Bildu, PP o formaciones independientes.

El acuerdo ha permitido que el PNV se haga con las alcaldías de los municipios guipuzcoanos de Mendaro, Soraluze y Lezo; los vizcaínos de Zaldibar y Alonsotegi y el alavés de Zigoitia, todas ellas localidades donde ganó los comicios la coalición abertzale.

El PNV también presidirá los ayuntamientos alaveses de Labastida y Laguardia, dos localidades riojano-alavesas donde ganó el PP, y Kuartango, donde el único edil del PP ha apoyado a los jeltzales ante el empate a votos y concejales que arrojó el escrutinio entre el PNV y EH Bildu.

Las grandes ciudades no escapan al pacto

El pacto entre PNV y PSE-EE proporciona una cómoda mayoría al PNV en las grandes ciudadades de Bizkaia, donde fue el más votado. Son los casos de Bilbao, Barakaldo, Getxo, Portugalete, Santurtzi, Basauri, Leioa, Erandio, Sestao, Ortuella, Muskiz, Trapagaran, los de la comarca de las Encartaciones y en Ermua. En la costa y la zona rural las alcaldías serán para PNV o EH Bildu, que prácticamente acaparan todos los concejales en esas zonas.

Durango escapa a este control tras el acuerdo de Bildu con Podemos, que le asegura la alcaldía a pesar de que el PNV resultó la fuerza más votada.

En Álava, el PNV gobernará en las tres principales localidades: en Vitoria, donde no ganaba desde hace 24 años, aunque será la única capital vasca en la que el pacto con el PSE no les da la mayoría; en Llodio, donde ha superado a EH Bildu que gobernó la pasada legislatura, y en Amurrio.

El PSE-EE repetirá alcaldía en Iruña de Oca y EH Bildu gobernará en nueve municipios. Mientras, el PP mantendrá los dos únicos ayuntamientos en toda la comunidad autónoma: Baños de Ebro y Navaridas.

En Gipuzkoa, se reedita el pacto PNV-PSE con mayoría absoluta en San Sebastián, donde el nacionalista Eneko Goia volverá a gobernar con comodidad.

El PSE-EE gobernará en Andoain con el apoyo del PNV, aunque fue EH Bildu el que ganó las elecciones municipales. Lo mismo ha ocurrido en Pasaia, donde también ganó EH Bildu, pero la suma de ambos partidos ha vuelto a investir a la socialista Izaskun Gómez como regidora.

Los socialistas gobernarán también en Irun, Lasarte-Oria, Eibar y Zumarraga. El PNV se ha hecho con las alcaldías de Lezo, Soraluze y Mendaro, localidades guipuzcoanas en las que ganó EH Bildu, pero en las que jeltzales y socialistas suman mayoría absoluta.

Por su parte, en Errenteria gobernará EH Bildu merced a un acuerdo con Elkarrekin Podemos.

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