El líder de la gestora socialista que renegó de Pablo Iglesias firma con Podemos sus últimos presupuestos en Asturias
El PSOE y Podemos han alcanzado un acuerdo presupuestario en uno de los lugares más insospechados: Asturias. El Principado uno de los territorios donde ambos partidos tienen peores relaciones, junto con Aragón. En 2015 fueron incapaces de cerrar el paso a la derecha en Gijón y a punto estuvieron de perder Oviedo, que solo se desbloqueó tras las renuncia a gobernar la marca municipalista de Podemos pese a tener más concejales. Tres años después, regreso de Pedro Sánchez mediante, el Ejecutivo de Javier Fernández, la dirección regional socialista y la de Daniel Ripa han logrado un entendimiento económico que parecía imposible.
El acuerdo se ha cerrado casi sobre la bocina. Sus líneas generales son satisfactorias para Podemos. “Es la reversión de todos los recortes públicos producidos desde 2010”, aseguran desde la dirección de Ripa. Las negociaciones se han prolongado hasta el último momento.
No fue hasta el lunes por la tarde-noche cuando el Consejo Ciudadano Autonómico asturiano dio su visto bueno al documento, la firma entre los dirigentes de la Federación Socialista Asturiana y de Podemos. El Gobierno no participó en el encuentro para la firma de las cuentas que el Consejo de Gobierno había aprobado por la mañana.
El jefe del Ejecutivo regional está de salida. Es una de las claves del acuerdo cerrado entre socialistas y Podemos. Fernández fue uno de los líderes del PSOE más combativos contra el partido de Pablo Iglesias desde su fundación. Comandó, tras la dimisión de Pedro Sánchez el 1 de octubre de 2016, la gestora del PSOE que dio la investidura a Mariano Rajoy. Y apoyó a Susana Díaz en las primarias que perdió contra el hoy presidente del Gobierno.
Tras esa batalla en el PSOE, Fernández anunció que no repetiría ni al frente de la federación asturiana ni como candidato a la presidencia del Principado. En ambos puestos le sucedió el sanchista Adrián Barbón. El líder del partido está llamado a comandar la candidatura en las próximas autonómicas de mayo de 2019.
Algunas de las principales medidas sociales tendrán un impacto en la segunda mitad de 2019, ya después de los próximo comicios y sin Fernández y los suyos en el Gobierno. Entre estos puntos, en Podemos destacan un 25% de reducción de las tasas universitarias, una recorte del 50% en las educación de 0 a 3 años, la reversión de todos los recortes en empleo publico, la contratación de 500 médicos y otros tantos profesores o la reducción de la jornada laboral de los empleados públicos a 35 horas.
Fuentes socialistas señalan a eldiario.es que Fernández no ha puesto trabas a un acuerdo que apenas gestionará. El todavía presidente del Principado solo estuvo en la primera reunión. Esas fuentes apuntan a que en otras ocasiones también ha sido así y que es normal que el acuerdo lo firmen los partidos porque contiene planteamientos políticos que van más allá de los económicos.
Quien sí ha participado ha sido su consejera de Hacienda, Dolores Carcedo. En una rueda de prensa este mismo martes, y preguntada por qué este año ha sido posible un pacto que se ha resistido en anteriores ejercicios, Carcedo decía: “No sé la razón concreta, pero hay un contexto y un acuerdo a nivel estatal, que creo que ha tenido también influencia”.
Con este acuerdo, al que se suma IU, el Gobierno asturiano saca sus primeras cuentas pactadas con la izquierda. En 2016 ya tuvo que prorrogar las de 2015. Y los Presupuestos de 2017 los acordó con el PP. Esos presupuestos se prorrogaron en 2018.
