El Constitucional abordará el 15 de enero la petición de excarcelación planteada por Oriol Junqueras y los Jordis
El Constitucional ha decidido esperar a que terminen las navidades para tomar una de las decisiones más importantes en relación con los políticos encarcelados por impulsar el procés. El próximo día 15, en su primer pleno de 2019, el Alto Tribunal tendrá que decidir sobre varios recursos de amparo planteados por Oriol Junqueras, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart en los que piden salir de prisión. Será la primera vez que el TC se posicione sobre la proporcionalidad de una prisión preventiva que se ha mantenido en el tiempo durante más de un año.
La previsión es que el Constitucional mantenga su criterio de no discutir las medidas de prisión preventiva impuestas por otros tribunales. El recurso presentado se produce después de que el juez Llarena hubiese negado en multitud de ocasiones la petición de libertad de los encarcelados en la causa del proceso.
El debate se ha pospuesto para después de navidades en un intento de alejarlo de las protestas en las calles, que acompañaron la celebración del Consejo de Ministros en Barcelona el pasado mes de diciembre. La decisión del Constitucional coincidirá en el tiempo con el arranque del juicio, estimado para finales de enero y también con la llegada al Congreso de los Presupuestos Generales del Estado, que Pedro Sánchez pretende aprobar con el apoyo de las formaciones independentistas catalanas.
Tras la decisión del tribunal, los políticos presos ya podrán acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH), la última vía de recurso y en la que el mundo independentista tiene depositadas sus principales esperanzas.
A finales de noviembre, Jordi Sànchez intentó acelerar su petición y se dirigió al TC presentando como argumento una sentencia que el TEDH había dictado en esos días. En esa sentencia el tribunal europeo aseguraba que la prisión impuesta por Turquía al líder kurdo, Selahattin Demirtas, pretendía “perseguir el pluralismo político”. El Constitucional concluyó un mes después que la sentencia sobre el líder kurdo no tenía capacidad de generar efecto en las decisiones de los tribunales españoles por lo que decidió no admitir la petición, a la espera de la decisión definitiva que adoptarán en enero.
Los recursos planteados por los líderes independentistas ante el Constitucional motivaron la huelga de hambre que comenzaron a principios de diciembre. Los primeros fueron Jordi Sànchez y Jordi Turull, que iniciaron esa protesta al considerar que el tribunal estaba dilatando la admisión a trámite de sus recursos.
Según explicaron, pretendían denunciar que el TC no había dado respuesta a una docena de recursos de amparo que habían presentado sus defensas y consideran que esa situación vulneraba sus derechos. Sus abogados añadieron que el tribunal había “olvidado en un cajón” todos los recursos.
Los dirigentes independentistas subrayaron que el TC responde los casos de prisión provisional en un plazo de 30 días mientras que los suyos llevan meses esperando. El primero es del 22 de noviembre de 2017, hace más de un año. Desde entonces ha habido hasta ocho recursos. Sànchez y Turull consideraban que la falta de diligencia del Constitucional les impide llevar su caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Finalmente los presos abandonaron la huelga de hambre el 20 de diciembre, después de que los expresidentes de la Generalitat y el Parlament se lo hubiesen pedido para “salvaguardar” su derecho a la vida y a la salud.
