El éxito de Vox en Extremadura alerta a los barones del PP: “Es muy difícil la mayoría absoluta”

“Con Vox por encima del 16% es muy difícil la mayoría absoluta”. Así de tajante se manifestó este lunes el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ante el auge de la extrema derecha en las elecciones extremeñas del pasado domingo. María Guardiola adelantó los comicios ante el “bloqueo” político por su falta de mayoría. Y aunque subió un diputado y el PSOE se despeñó, Vox duplicó resultados, se mantiene como imprescindible para la gobernabilidad y ha advertido de que no cederá en ninguna de sus exigencias ideológicas y de sillones.

La sede nacional del PP acogió este lunes a su Junta Directiva Nacional. Guardiola entró del brazo de Alberto Núñez Feijóo y recibió el aplauso y cariño de presidentes autonómicos y dirigentes llegados de todo el país. El ambiente era festivo, como si la presidenta extremeña hubiera alcanzado la mayoría absoluta. Pero nada más lejos de la realidad.

Feijóo sostuvo ante los suyos que la debacle socialista de Extremadura es el principio del fin de Pedro Sánchez. El líder del PP aludió al “efecto dominó”. La del domingo sería la primera pieza de una cadena de elecciones que se celebrarán a lo largo de 2026. Una a una, las comunidades autónomas certificarán el mal momento de Pedro Sánchez y de su partido. Según esta tesis, la presión será insoportable y el presidente del Gobierno terminará por rendirse.

El problema para Feijóo es que los demás también juegan. Y, para su sorpresa, ninguno tiene entre sus prioridades favorecer al PP sin más. “La gente quiere al PP frente a quienes solo querían impedir nuestra victoria”, dijo este lunes ante su plana mayor. Por si quedaba alguna duda, remachó: “El objetivo compartido del PSOE y de Vox era frenar al PP”.

Pese a la euforia y a los mensajes prefabricados que distribuye el equipo de Feijóo sobre el éxito de Guardiola, el líder del PP lanzó ya este lunes un mensaje al partido de Santiago Abascal. “Espero que Vox no se equivoque de adversario nunca más. El adversario no es el PP”. Feijóo pidió no hacer “interpretaciones caprichosas” y “responsabilidad y proporcionalidad” en la negociación.

Moreno vaticina un “crecimiento generalizado” de Vox

Si la noche electoral fue un éxito para el PP de Feijóo, los barones autonómicos que afrontan elecciones en los próximos meses contienen la respiración ante la posibilidad nada desdeñable de que se replique en sus territorios lo ocurrido en Extremadura.

El presidente andaluz incluso desliza ya la posibilidad de perder la mayoría absoluta que logró en 2022. Sin fecha aún para sus elecciones, previstas para la próxima primavera, Moreno aseguró este lunes a los periodistas que Vox seguirá subiendo en las próximas citas electorales… por culpa de Pedro Sánchez.

“Mientras Sánchez sea presidente del Gobierno, Vox seguirá subiendo porque se retroalimenta del 'sanchismo'”, aseguró. En su opinión, “Vox empezará a bajar cuando entren en gobiernos, asuman responsabilidades, se desgasten y demuestren que sus políticas no son viables”.

Pero la dirección nacional del PP no quiere ni oír hablar de gobiernos de coalición, una experiencia por la que ya pasaron tras los comicios de 2023 y que solo le supuso quebraderos de cabeza a Feijóo, que achaca a aquellos acuerdos con Vox el fiasco de su asalto a la Moncloa. Preguntados expresamente por la posibilidad de abrir la puerta de los gobiernos autonómicos otra vez a Vox, desde Génova responden tajantes: “Preferimos en solitario”. De hecho, creen improbable que los de Abascal pidan entrar cuando fue precisamente la salida coordinada de los ejecutivos en el verano de 2024 lo que ha permitido a la extrema derecha recuperar su agenda ultra y ganar vigor en las urnas. El líder de Vox no se ha cerrado, de momento, a ninguna posibilidad.

Moreno sostuvo este lunes que “la tendencia de Vox será de crecimiento de forma generalizada”. Algo que, dijo, le “preocupa”. El presidente andaluz logró acceder al Palacio de San Telmo en 2019 tras perder las elecciones ante Susana Díaz y gracias a un acuerdo tripartito con Ciudadanos y Vox, que también apoyó diferentes presupuestos y leyes.

Azcón: “Vox es un partido minoritario”

Ese “crecimiento generalizado” tendrá un primer test en Aragón el próximo 8 de febrero. Como Guardiola, Jorge Azcón convocó a las urnas ante el bloqueo de sus Presupuestos. También como su compañera, lo hizo sin siquiera debatirlos en las Cortes.

Azcón siguió el domingo el recuento electoral desde la sede nacional del PP en Madrid. Feijóo y los suyos le señalaron como el próximo encargado de llevar su triunfo electoral en ofrenda al edificio situado en el número 13 de la madrileña calle de Génova. Y su análisis no coincide exactamente con el de Moreno. “El papel de Vox es el de un partido minoritario”, aseguró ante los periodistas el presidente aragonés. “Crece”, dijo, “pero sigue siendo minoritario”. 

Ya en modo preelectoral, Azcón aseguró que Vox “puede decidir si sigue bloqueando” o si “ayuda” al PP. Una idea, la de “ayudar”, que Abascal ha descartado totalmente. Desde que Vox ha pasado a la oposición tanto a nivel estatal como autonómico, sus réditos electorales cotizan al alza.

Azcón ha tomado buena nota de la campaña que ha hecho María Guardiola en Extremadura. Y pese a decir que la suya “se va a parecer mucho”, ya ha planteado dos cambios importantes. Primero, habrá debates electorales, algo de lo que ha huido María Guardiola. Segundo, una relevante presencia de Feijóo, ausente en la segunda semana de campaña en Extremadura. “Quiero que el PP y el líder estén muy presentes”.

Tras Azcón, llegará el turno de Alfonso Fernández Mañueco en Castilla y León, donde habrá elecciones en marzo. Ante los periodistas en Madrid, el barón intentó desligarse de lo que está pasando en Extremadura y se limitó a contestar que “María [Guardiola] sabe lo que tiene que hacer” para lidiar con el resultado.

Otros barones que no tienen una inminente cita electoral están viendo que las encuestas reflejan un continuo ascenso de Vox. Murcia es uno de los bastiones electorales del PP, pero también de la extrema derecha. Su presidente, Fernando López Miras, defendió este lunes la legitimidad de Guardiola para gobernar en solitario y sin imposiciones de Vox. “¿Van a comparar un 43% con un 17%?”, dijo. Y ante la cuestión de si la extrema derecha podría pedir la cabeza de Guardiola, como dijo Abascal en el arranque de la campaña, el barón del PP replicó: “No hay duda de que la presidenta tiene que ser Guardiola. Quien ha sacado un 16 puede estar en situación de solicitar o pedir cuestiones, pero no de bloquear una región”.

En la dirección nacional del PP los miedos son menos. Para el equipo de Feijóo la clave está en la debacle del PSOE, partido al que han pedido una “refundación urgente”. “El momento es diferente” al de 2023, aseguran fuentes de la dirección del PP a elDiario.es. “Con que Vox no vote con Podemos, sale todo”, apuntan. 

En Génova prefieren que los votos vayan a Vox antes que el PSOE. Y creen que la “competencia” con la extrema derecha les “centra”. Y sobre el riesgo para los barones que se juegan sus gobiernos en los próximos meses, señalan al electorado de cada región: “Veremos si lo interpretan de manera correcta en Aragón y Castilla y León”.