El Vaticano admite que “la mayoría de los jóvenes católicos no sigue la moral sexual de la Iglesia”

Por primera vez en su historia, el Vaticano parece decidido a escuchar a los jóvenes católicos. Así, al menos, se desprende de la publicación del Instrumentum Laboris (documento preparatorio) del Sínodo de Obispos, que el próximo mes de octubre reunirá a obispos de todo el mundo, convocados por el Papa, y que reconoce cómo “la mayoría de los jóvenes católicos no siguen las indicaciones de la moral sexual de la Iglesia”.

No sólo eso: el papa Francisco quiere, y así se recoge en el documento, que el Sínodo debata “abiertamente y sin prejuicios” sobre la homosexualidad, el sexo antes del matrimonio, el aborto, los anticonceptivos o la cuestión de género, que históricamente han estado prohibidos y sobre los que “los jóvenes ya discuten libremente y sin tabúes”.

A lo largo del texto, se recogen algunas de las preocupaciones de los jóvenes católicos de todo el mundo, desde la droga a las nuevas tecnologías, pasando por el empleo precario o el paro, las migraciones o el papel de la mujer. Pero, sin duda, la corrupción y la pederastia son dos de los temas estrella. En este sentido, el documento del Sínodo constata que muchos jóvenes se han alejado de la Iglesia, a la que consideran “una presencia molesta e irritante”, que no ha sabido erradicar estas lacras de la institución.

Así, frente a los escándalos de abusos del clero, exigen al Vaticano que “fortalezca su política de tolerancia cero contra el abuso sexual dentro de sus instituciones”. Del mismo modo, piden a la “jerarquía eclesiástica” que la Iglesia sea “transparente, acogedora, honesta, atractiva, comunicativa, accesible, alegre e interactiva”, y que la Iglesia “sea una institución que brille por su ejemplo, competencia, corresponsabilidad y solidez cultural” y no “solo sean sermones”.

“Los jóvenes desean una Iglesia auténtica, una comunidad transparente, acogedora, honesta, atractiva, comunicativa, accesible, alegre e interactiva”, añade el 'Instrumentum Laboris', que se divide en tres partes: Reconocer, Interpretar y Elegir. Una vertiente del “Ver, Juzgar y Actuar”, con una variante: en esta ocasión no se buscan soluciones finalistas, sino “pasos concretos”, ante una realidad que, en ocasiones, aleja a los jóvenes de la Iglesia. ¿Es tiempo de que vuelvan? A algunos se les antoja demasiado tarde.