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Almería exige a ritmo de pasodoble un conservatorio digno tras 25 años de espera

Protesta de profesorado y alumnos del conservatorio de Almería pididendo unas condiciones dignas /foto: IMas

Iñigo Mas

Almería —

Recuerdan que cuando se construyó el Conservatorio, hace ya más de dos décadas, se incluyó en el proyecto original cierto número de aulas que todavía no han llegado a realizarse, quedando en papel mojado. Tampoco dispone el edificio de Auditorio, ni el Conservatorio cumple con la normativa de edificación y de prevención de riesgos laborales, según ha afirmado Pilar Jerez, vicepresidenta de la AMPA de Música. Pero una de las principales cuestiones es la masificación que significa unificar las clases de Danza con las de Música, por lo que piden que por una parte exista un conservatorio de danza y por otra uno de música. “Hace 25 años se hizo el conservatorio de música y ahí metieron a los de danza y estamos compartiendo las dos disciplinas sin cumplir la normativa. Son promesas incumplidas durante este tiempo que han venido diciendo que se iba a construir uno de danza” afirman los padres y madres del alumnado portando la pancarta que abría la manifestación, cansados ya de tantos años de falsas expectativas de edificios dignos.

El Parlamento Andaluz ha aprobado recientemente una Proposición No de Ley, a instancias del Partido Popular, con el apoyo de todos los grupos políticos, instando a la construcción de un Conservatorio de Danza almeriense, pero la noticia no ha sido suficiente para que la movilización, en la que no hay ningún partido, al estar radicada exclusivamente en los padres y madres de alumnos, el alumnado y el profesorado, en huelga, se detuviera. Están tan hartos que nuevas promesas no han sido suficientes. “Si los partidos políticos nos apoyan, que es lo que deberían hacer, nosotros encantados”, mantiene Pilar Jerez, que dio lectura al finalizar la protesta a un comunicado de los convocantes.

Desde el pasado 15 de septiembre en que empezó el curso escolar comenzaron las actividades de protesta. Durante las dos primeras semanas hubo concentraciones diarias de una hora por la tarde en la calle sin que el alumnado asistiera a clase. “Y vamos a seguir”, afirma Jerez, ya que “coincidiendo con la segunda jornada de huelga del profesorado vamos a impartir clases en la calle, un mercadillo musical, conciertos…” Su movilización, que ha tomado la calle, se ha escuchado en toda la ciudad, viviendo ensayos y la vida habitual que se tendría que haber realizado en el interior del edificio, a las puertas del polémico edificio. “Hasta que haya una respuesta positiva por parte de la delegación de educación de la Junta nada nos va a detener”, sentencia Jerez. Se calcula que hay unos 1500 alumnos entre música y danza en el conservatorio y unos 100-120 profesores entre ambas disciplinas, y pocos, por no decir ninguno, no secundaron la movilización, dato que difiere con la cifra de asistentes ofrecida por la Policía Nacional de 500 personas.

Las enseñanzas básicas en el conservatorio son de cuatro años y las profesionales de seis más, un total de diez años que las familias y los alumnos invierten en una carrera que puede servir como profesión, una inversión de tiempo y dinero considerable. Además se protesta porque el de Almería es el único conservatorio de Andalucía que no tiene Auditorio y además el único en el que se comparten las enseñanzas de música y danza. “Padecemos masificación, muchos ruidos, las clases de música y de danza se interrumpen porque las aulas no están acondicionadas, no hay insonorización adecuada. No le pedimos a la Junta nada extraño, solamente tener las mismas condiciones que el resto de conservatorios de las otras provincias que cuentan con inversiones dignas, que no se olviden de Almería”, detallaba Pilar Jerez. La manifestación finalizaba con un gran concierto en la Plaza de las Velas, frente al mar, tras cruzar todo el Paseo de Almería, el centro de la capital, interpretando el ‘Himno a la Alegría’, una clave para entender la filosofía con que música y danza se enfrentan todos los días a sus problemas de enseñanza.

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