CCOO denuncia presiones y malas condiciones laborales de los empleados de los supermercados Dani
Fundada en 1959 como un supermercado de barrio, hablar de la cadena de supermercados Dani es hablar de su eslogan que da por bueno la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU): “La más barata de España”. Daniel es el nombre del propietario y creador de un modelo casi unipersonal en el que los niveles directivos son reducidos y donde las decisiones apenas pasan por más manos que las suyas tal y como desliza en una entrevista en 'El Español'. No obstante, se trata de una marca desconocida fuera de la provincia de Granada que cuenta con una sucursal en Jaén, otra en Almería y dos más en Málaga que se suman a las catorce granadinas empleando en total a alrededor de 500 trabajadores en diferentes puestos. Empleados que en su mayoría se encuentran con una mala situación laboral que ha salido a la luz en las últimas semanas fruto de un conflicto sindical.
El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) denuncia que se están produciendo situaciones de 'mobbing' y acoso laboral a determinados empleados que habían decidido dar el salto y presentarse como candidatos de esta formación al comité de empresa que debe renovarse este mes de julio. El acoso consiste, según explican desde CCOO, en presionar a los trabajadores para que desistan de presentarse con amenazas de despido o invitaciones para que firmen bajas voluntarias. La denuncia, que ha servido para poner de relieve esos casos, ha sacado a la luz a su vez más prácticas que van contra los trabajadores y que estos no se atreven a denunciar dentro de la empresa por miedo a represalias.
Un conflicto enquistado
El comité de empresa de Supermercados Dani, que es quien debe velar por los derechos de los trabajadores, es un comité formado exclusivamente por el sindicato Unión General de Trabajadores (UGT). El mismo es el que ostenta por tanto la voz y el voto en exclusiva para poder llevar a cabo los cambios que pidan los empleados y para negociar las condiciones de un convenio colectivo que parece no cumplirse, según explican los empleados con los que este medio se ha puesto en contacto.
Precisamente porque el comité de empresa solo cuenta con un sindicato, la renovación que debe llevarse a cabo ha supuesto un problema dentro de la empresa. Porque CCOO quiere entrar a formar parte de él a través de un proceso electoral que a su juicio está siendo manipulado. Acusan al sindicato UGT de manipular y presionar a los trabajadores. De hecho, el sindicato denuncia que en menos de un mes han sido despedidos alrededor de diez empleados por haber querido formar parte de las listas de CCOO al comité de empresa.
Denuncias ante la Guardia Civil
No es lo único que ha denunciado el sindicato. Uno de sus portavoces, Roberto Ariza, asegura que durante una visita rutinaria para ofrecer su colaboración a uno de los empleados que están siendo presionados, un alto cargo de Supermercados Dani se introdujo en su vehículo para robarle documentación sobre el proceso electoral en el que estaban los nombres de los trabajadores que estarían planteándose la posibilidad de presentarse por CCOO a las elecciones para el comité de empresa. De hecho, Ariza señala directamente al responsable de Recursos Humanos como la persona que se introdujo en su vehículo privado y al que ha denunciado ante la Guardia Civil. Este medio ha tratado de ponerse en contacto con el aludido para conocer su versión de los hechos pero no ha sido posible por encontrarse de vacaciones.
La situación en cifras
Los empleados con los que ha podido hablar eldiario.es/andalucia coinciden en señalar que las condiciones laborales no son siempre las que deberían ser. Fuentes de CCOO van más allá y señalan que “el convenio colectivo no se respeta en absoluto”. Juan -nombre ficticio- es uno de los trabajadores que acaba de ser despedido, tras una década en la empresa, por intentar optar al comité de empresa y detalla los problemas que día a día viven él y sus compañeros. Recuerda que “todos estos años nos daban un sobre cerrado para que votásemos” y que durante el proceso electoral llegaba un encargado de Dani para decirle a varios trabajadores “tú te presentas”.
Para este empleado, cuyo despido será revisado cuando culmine la renovación del comité por si se considera improcedente, “los trabajadores están en malas condiciones laborales” empezando por un salario con el que buena parte de la plantilla no llega a los 1.000 euros mensuales. “Los horarios no se respetan porque de hecho la mitad de los trabajadores están con contratos de formación que evidentemente no se cumplen” señala este trabajador. Según cifras de la Seguridad Social, el 37% de los empleados de las sucursales que tiene Dani en la provincia de Granada son bajo el régimen de formación.
Además, datos facilitados por CCOO según el censo de la plantilla en la provincia de Granada a 20 de junio sobre los contratos que se han firmado según la fecha, denotan que en los dos últimos años se han firmado contratos a 192 trabajadores de los 408 empleados con los que cuenta actualmente la empresa y cuyos contratos más antiguos son desde 1985. Dicha estadística es para Roberto Ariza de CCOO la prueba de que en “Dani se firman tantos contratos de formación que algunos supermercados los llevan entre trabajadores que llevan pocos meses o incluso días”. El argumento gana peso cuando los números confirman que de los 192 contratos hechos entre 2017 y 2018 solo el 16,7% son indefinidos.
A esa situación se le suma que, según ha denunciado el sindicato ante Inspección de Trabajo, a los trabajadores en formación se les ha renovado el contrato cambiando la fecha de inicio del mismo para que no puedan contar con la antigüedad necesaria. Algo que es ilegal ya que la fecha debe ser la que era cuando el contrato se firmó por primera vez.
Para las mujeres que trabajan en Dani, sus condiciones laborales no son mucho mejores. Algunas empleadas explican que quienes estén pensando en quedarse embarazadas son advertidas por parte de la empresa para que no lo hagan porque podrían despedirlas. Una queja que se traduce en que de 198 contratos fijos, 79 corresponden a mujeres, el resto son hombres. Lo mismo se repite en cuanto a los temporales. Del total de 169, 79 llevan nombre de mujer. Las mismas estadísticas de CCOO muestran que los 26 contratos a tiempo parcial que hay firmados son de mujeres. A tiempo completo solo hay 158 mujeres por los 209 hombres que están empleados.
Supermercados Dani calla
Este medio ha tratado ponerse en contacto en varias ocasiones con diferentes miembros de relevancia de la empresa para conocer su versión de los hechos. Todos ellos han declinado las invitaciones para hablar. Juan Luis, uno de los supervisores con los que sí ha podido hablar eldiario.es/andalucia sostiene que “yo no puedo hablar de nada de eso porque tampoco sé lo que está pasando, pues no es mi trabajo”. Su nombre aparece en boca de todos los denunciantes asegurando que es “mano derecha de Daniel” y uno de los que presiona a los empleados.
Por su parte, el sindicato UGT, señalado por CCOO por considerar que su labor dentro del comité de empresa es dudosa y que se basa en llevar a cabo lo que la propiedad de Supermercados Dani diga, responde a este medio a través de su portavoz en Granada para grandes almacenes, José Antonio Lupiáñez que “lo que me trasladan desde el comité de empresa es que todo lo que se dice no es cierto”. Sin embargo, pese a la invitación, la presidencia de dicho comité, ha declinado hacer ningún tipo de declaración a eldiario.es/andalucia.